El alcalde reconoce que erradicar el botellón «no es fácil» y se muestra más partidario de la «didáctica que de dar palos»

El alcalde señala que no se pueden vincular las fiestas de San Julián con los eventos de botellón y afirma que se trabaja con Policía Local y Nacional para erradicarlo

El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha asegurado este martes que se sigue trabajando para atajar el botellón en la ciudad de Cuenca, recordando que está prohibido desde el año pasado y apuntando que “no es fácil, lo están viendo en toda la geografía nacional lo que pasa en distintos emplazamientos”.

En declaraciones a preguntas de los medios de comunicación ha señalado que no hay vinculación con las fiestas de San Julián puesto que “hemos tenido eventos de botellón desde hace muchísimos años en la ciudad de Cuenca” y ha insistido en que “vamos a seguir trabajando para que termine por desaparecer” trabajando con Policía Local y con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado como Policía Nacional.

Dolz ha mostrado su preocupación y ha dicho que “los que están hoy con una botella bebiendo se pueden ver con otras botellas y en otro sitio, y ese otro sitio es el hospital Virgen de la Luz”. Por ello ha vuelto a hacer un llamamiento a la responsabilidad, añadiendo además que “no queremos tener también un problema de ámbito social mayor, no vamos a entrar a dar palos a nadie, hay que hacer más didáctica en este sentido”, por lo que ha pedido a la gente joven, asegurando que entiende que se lo tienen que pasar bien, “que busquen otras opciones”.