Inauguradas dos plantas fotovoltaicas en Minglanilla y Graja de Iniesta que podrían abastecer a una ciudad como Cuenca

Su construcción ha supuesto la inversión de 75 millones de euros y 250 puestos de trabajo, esencialmente de vecinos de la zona

El Gobierno de Castilla-La Mancha va a exigir poder disponer de la energía que se produce en la región para impulsar así el desarrollo económico y social de la Comunidad Autónoma. Así lo ha dicho el vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, durante la inauguración de dos plantas fotovoltaicas que Endesa ha construido en los términos municipales de Graja de Iniesta y Minglanilla, ambos en Cuenca, y donde ha destacado que esta comarca -la de La Manchuela- es una de las zonas del país donde más energía se produce y sin embargo no dispone de esa energía para la instalación de empresas.

“No puede ser que haya problemas para instalar proyectos porque no tengan potencia energética disponible; necesitamos la energía para nuestros proyectos; queremos generar electricidad para el resto de España, pero que no pase como con el trasvase Tajo-Segura», ha sentenciado.

En este sentido, el vicepresidente ha recordado que Castilla-La Mancha cerró el año pasado liderando la instalación de energía a través de renovables, tanto fotovoltaica como eólica, sumando un total de 3.730 megavatios (MW) de energía fotovoltaica, lo que supone un 21 por ciento del total instalado a nivel nacional, y 4.525 MW de energía eólica, el 15 por ciento de la instalada a nivel nacional.

Datos que demuestran, tal y como ha dicho, la apuesta del Ejecutivo de Emiliano García-Page por acelerar la transición energética contando siempre con el territorio, teniendo en cuenta a los vecinos de aquellas zonas donde se instalan para que lo vean como algo propio.

1,2 millones para impulsar la Reserva de la Biosfera

Durante su intervención, Martínez Guijarro ha avanzado que este lunes se va a publicar una convocatoria de ayudas por un importe de 1.209.600 euros para la financiación de actuaciones que impulsan el desarrollo socioeconómico de la Reserva de la Biosfera del Valle del Cabriel y de la Reserva de la Biosfera del Alto Turia, “para seguir avanzando en el respeto al medio ambiente y promocionar esta zona”.

El objetivo de estas ayudas, tal y como ha explicado el vicepresidente, es dinamizar las áreas rurales que están bajo la influencia del Valle del Cabriel e impulsar la creación de riqueza y empleo en estas zonas de la provincia de Cuenca.

Minglanilla I y II

Las plantas que hoy se han inaugurado -Minglanilla I y II- están ubicadas entre los términos municipales de Minglanilla y Graja de Iniesta. Su construcción ha supuesto la inversión de 75 millones de euros y 250 puestos de trabajo, esencialmente de vecinos de la zona.

Juntas supondrá la generación de energía eléctrica suficiente para abastecer el consumo de una ciudad como Cuenca y Albacete a la vez que reducirá las emisiones equivalentes a unos 19.000 vehículos. En ambos casos, su explotación es compatible con la producción de azafrán, con la apicultura -producción de miel solar- y con el pastoreo.

Minglanilla I y II son dos de las cinco plantas solares que Endesa ha construido en Castilla-La Mancha a las que hay que sumar tres plantas eólicas, casi la mitad de los proyectos renovables que ha puesto en marcha en todo el territorio nacional, que han permitido generar 1.400 puestos de trabajo directo cualificado y han dejado una inversión en la zona de 377 millones de euros.

A la inauguración han asistido el alcalde de Minglanilla, José Luis Hervás; el presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana; el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero; el director general de Generación de ENDESA, Rafael González Sánchez; y el director general de Relaciones Institucionales y Regulación de la empresa, José Casas Marín.