Un millón de huevos al día repletos de datos: cómo el blockchain reinventa el sector desde Saelices

La empresa conquense Rujamar, la mayor productora de ecológico en España, incluye un código QR en cada una de las hueveras que surte a Alcampo con información de trazabilidad que registra hasta el momento de la puesta o la edad del ave

“Detrás de ese huevo que te vas a comer, hay una historia”. Es la idea que más se ha repetido en la presentación de este jueves del innovador sistema de trazabilidad de la empresa conquense Rujamar, basada en la tecnología del Blockchain. La compañía, entre sus tres centros de San Lorenzo de la Parrilla, Honrubia y Saelices, produce más de un millón de huevos diarios en los sistemas de suelo, campero y ecológico. Un millón de historias al día, cada una única, que ahora están accesibles al cliente a través de un código QR en cada paquete.

El blockchain es una tecnología que permite la transferencia de datos digitales a través de un registro seguro y sincronizado, que en su aplicación a la industria alimentaria proporciona información amplia y detallada sobre el origen y el proceso de elaboración de cada producto. En el caso de estos huevos, registra el momento en que las gallinas han puesto el huevo, el tipo de producción, la localización de la granja, los datos de la gallina, la alimentación que ha recibido, la clase de huevo por tamaño y su fecha de recogida.

Rubén Martínez, presidente ejecutivo de Rujamar, señala que la implementación de este sistema de trazabilidad es una oportunidad de mostrar el buen hacer de su empresa, además de que el cliente sepa cada detalle sobre el producto que está llevando a su mesa. No solo sobre el huevo, también sobre la filosofía de respeto al animal que defiende Rujamar.

Martíneza destaca que hay un gran número de variables fijas y otras que se modifican en cada producto, y que todas son interesantes para el consumidor: “¿Cómo puedo informar a la gente de cómo es mi empresa? ¿Sabes que una gallina morena pone huevos morenos? ¿Tú sabes la edad que tiene una gallina en una nave de puesta? ¿Tú sabes de dónde vienen los huevos que tú compras? ¿Tú sabes el tiempo que pasan en una cámara frigorífica?”

Ahora, gracias a la tecnología blockchain implementada en su centro de Saelices, los huevos camperos vendidos en los supermercados Alcampo darán respuesta a estas preguntas al escanear el código QR presente en el embalaje que se genera de manera diaria en el centro de clasificación y envasado con cada lote de producto.

La empresa conquense es la más grande de España y la segunda de Europa en producción ecológica, con casi 150.000 gallinas bajo este sistema de producción en sus instalaciones de Honrubia. El presidente destaca que en 2018 tomaron la decisión de eliminar las jaulas “por una creencia mía de que una gallina no debe vivir enjaulada”, y que desde entonces viven en un continuo proceso de transformación y evolución en ocasiones “costoso”.

Una apuesta pionera en España que ha dado sus frutos y que de cara al futuro se enfrenta al reto de mostrar, a un consumidor cada vez más concienciado, las bondades del sistema de producción del que hacen bandera desde sus instalaciones en la provincia de Cuenca. Los impulsores del proyecto defienden la importancia de contar la historia que hay detrás de cada huevo, ya que, afirman, los clientes que eligen sus productos comparten los mismos valores de sostenibilidad y respeto al animal.