Sánchez Albendea pide tranquilidad y fe porque, a día de hoy, no se ha barajado suspender la Semana Santa

No hay ‘Plan B’ en caso de que no se pueda celebrar: “La Semana Santa es una celebración litúrgica que tiene unas fechas marcadas en el calendario, no se pueden llevar a otra fecha”

El presidente de la Junta de Cofradías, Jorge Sánchez Albendea manda un mensaje de tranquilidad, optimismo y de “tener fe” a la comunidad nazarena ante la amenaza del coronavirus, “porque todavía faltan 25 días para el Domingo de Ramos y hay que tener cautela y paciencia para ver cómo se desenvuelven los acontecimientos”.

Sánchez Albendea  comenta que “en ningún momento” se han propuesto medidas que afecten a la Semana Santa encima de la mesa y mantienen contacto con las autoridades competentes, especialmente con el Ayuntamiento de Cuenca, para ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Tampoco se ha puesto ningún tipo de plazo para tomar decisiones, “simplemente seguiremos las recomendaciones que se lanzan a los ciudadanos y si surge algo haremos lo que las autoridades nos digan”.

El aplazamiento de Las Fallas ha puesto en alarma al mundo semanasantero conquense pero insiste el presidente de la JdC en llamar a la prudencia y a la tranquilidad y a desmentir “los posibles bulos que pueda haber, porque en ningún momento se ha barajado nada” y confía en que las administraciones responsables irán tomando las decisiones pertinentes, pero a día de hoy, en el momento en el que se escribe esta noticia, no se ha puesto sobre la mesa una posible suspensión de la Pasión conquense.

¿Y si hubiera que hacerlo? “Sería un paso que no se ha dado nunca, pero si una autoridad sanitario competente la prohíbe el sentido común dice que deberemos colaborar y acatar las decisiones que se adopten, confiando en el buen criterio de las personas que competen”.

Lo que no hay es ‘Plan B’ en caso de que no se pueda celebrar: “La Semana Santa es una celebración litúrgica que tiene unas fechas marcadas en el calendario, no se pueden llevar a otra fecha”.

Respecto al pregón de Antonio Pelayo, que vive en Roma, Jorge Sánchez Albendea, explica que habló con él por última vez este martes “y está tranquilo, cumpliendo las medidas a las que está sometido cualquier ciudadano italiano”. Le contó que “tiene el pregón prácticamente terminado” y espera que de aquí a 23 días ya no exista la prohibición de viajar desde ese país. Tampoco se han pensado en alternativas en el caso de que no pueda desplazare a Cuenca, “llegado el momento lo veríamos, porque es alarmar a la gente cuando todavía no hay motivo para ello”.

En los próximos días se celebrará la Junta de Seguridad de Semana Santa, de la que forman parte la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento y probablemente será una de las cuestiones que protagonizarán esa reunión.