La startup que ayuda a compensar la huella de carbono desde una pedanía de 16 habitantes

Forest Bank se ha instalado en Torrecilla, dependiente del municipio de Sotorribas

Invierte en Cuenca elogia a Forest Bank como un proyecto original e innovador que cumple con los objetivos de este programa al tener un claro aspecto de dinamizador económico en una zona despoblada y que además lo hace mediante el cuidado del medio ambiente.

El técnico de la Oficina de Atención al Inversor, Julián Sorando, y el técnico del Departamento Económico de CEOE CEPYME Cuenca, Mario Palomero se desplazaron a Torrecilla, ubicación de la startup, y una de las zonas más intensamente despobladas de la provincia, con el fin de conocer el proyecto y su apuesta por eliminar la huella de carbono de sus clientes con un especial compromiso por las zonas despobladas.

En este sentido valoraron el esfuerzo de los tres empresarios por instalarse en esta pequeña pedanía de Sotorribas, que cuenta con 16 habitantes censados, aprovechando que es el origen de dos de ellos, destacando que la mejor manera de luchar contra la despoblación es la instalación de empresas que suponen fijar población y más en zonas rurales donde un autónomo o pequeño empresario tiene un efecto muy positivo en el futuro de la localidad.

Así, el CEO de esta empresa, Vicente Cano pasa en Torrecilla mucho tiempo para aprovechar su tranquilidad y la naturaleza que rodea a este municipio, mientras que los otros dos emprendedores Antonio Barbero (UX Lead) y Francisco Almodóvar (Legal Manager) tienen casa allí.

Los técnicos de CEOE CEPYME Cuenca mostraron lo insólito y valioso que supone que una startup como Forest Bank nazca en Torrecilla y lo haga mediante proyectos de reforestación para captar CO2 y, por medio de ellos, ofrecer a personas alcanzar las cero emisiones netas.

En esta startup también disponen de un servicio de empresas mediante el que consiguen que estas reduzcan y compensen sus emisiones pero también transmitan este esfuerzo medioambiental de una manera mucho más eficaz y honesta.

Invierte en Cuenca es una iniciativa de CEOE CEPYME Cuenca con el patrocinio de la Diputación Provincial y la colaboración de Globalcaja y Auracar que trabaja para la llegada de nuevas inversiones y el inicio de actividades empresariales en la provincia.

En este caso se traslada a la provincia un proyecto que trabajaba en La Nave, centro de innovación del Ayuntamiento de Madrid, donde se ha estado incubando más de un año, pero que cuya idea de negocio y la propia startup han nacido en Torrecilla.

Forest Bank

La propuesta a los usuarios de Forest Bank es plantar ahora los árboles que se necesitan para alcanzar las cero emisiones de CO2 netas cada año durante los próximos 35 o 40 años.

Por cada tonelada de CO2 al año que sus usuarios necesiten compensar, Forest Bank planta los ejemplares suficientes (entre 80 y 300) para que estos 1.000 kilogramos de carbono sean fijados anualmente. De este modo la empresa no solo certifica el bono absorbido en cada proyecto forestal, sino que sus clientes son cero emisiones netas.

El modelo masivo de Forest Bank ofrece algunas ventajas que lo hacen único, entre ellas, si el usuario quiere recuperar su aportación, Forest Bank se compromete a intentar devolver a sus clientes la totalidad del importe gastado en su proyecto de mitigación a través de la venta de bonos de carbono generados por los árboles plantados para sus usuarios.

Forest Bank opera como si fuera un banco personal de árboles para sus clientes y propone al mismo tiempo una estrategia para reducir la huella de sus clientes y un plan para compensar todas las emisiones que no vayan a ser reducidas las próximas 35 o 40 años.

En el caso de las empresas Forest Bank no comercializa directamente bonos de carbono, sino que diseña y gestiona proyectos forestales corporativos que se llevarán a cabo en toda España.

A pesar de que inicialmente los costes sean más altos, para los clientes corporativos promover un proyecto forestal tiene ventajas como es el hecho de que, a medio y largo plazo, esos costes de compensación son muy inferiores a los de comprar bonos de carbono al precio de mercado.