La conquense Cristina Guijarro participa en un estudio nacional sobre las manifestaciones neurológicas de la COVID-19

Entre sus conclusiones, destaca la importancia de que "la población conozca que la cefalea, la alteración del olfato y las molestias musculares, pueden ser síntomas precoces de COVID19, para que se aíslen y se evite la transmisión de esta enfermedad".

La neuróloga conquense Cristina Guijarro Castro ha participado en la elaboración del estudio nacional sobre los hallazgos del «Registro NeuroCOVID-19» de la Sociedad Española de Neurología que acaba de ser publicado en la revista «Journal of Neurological Sciences«. Se trata de un estudio multicéntrico en el que han participado pacientes con manifestaciones neurológicas de COVID-19.

Se trata de un estudio multicéntrico con pacientes con manifestaciones neurológicas de COVID-19. Entre sus principales conclusiones, Cristina Guijarro, neuróloga del Hospital Virgen de la Luz, profesora asociada del Grado de Medicina y miembro del Comité de Ética y Deontología de la Sociedad Española de Neurología; ha destacado la importancia de que «la población conozca que la cefalea, la alteración del olfato y las molestias musculares, pueden ser síntomas precoces de COVID19, para que se aíslen y se evite la transmisión de esta enfermedad».

Se presentaron un total de 233 casos, incluidas 74 combinaciones diferentes de manifestaciones clínicas. La neuróloga conquense precisa que «las más frecuentes fueron ictus (27%), síntomas neuromusculares (23,6%), síndrome confusional (23,6%), pérdida de olfato (17,6%), dolor de cabeza (12,9%) y convulsiones (11,6%). La edad media de los pacientes fue de 61,1 años, siendo el 42,1% mujeres; se registró una mayor proporción de mujeres entre los pacientes con síndrome confusional, anosmia y dolor de cabeza. El inicio de los síntomas difirió dentro de las categorías. El inicio de la anosmia o pérdida de olfato, se produjo a los 2,5 días después del primer síntoma general, mientras que los síntomas neuromusculares aparecieron después de 14 días. Los síntomas neurológicos fueron persistentes en el 33% de los pacientes».

Por último, concluye que las manifestaciones neurológicas de COVID-19 son diversas. «La anosmia, la mialgia y el dolor de cabeza se presentan más temprano en el curso de la enfermedad. El síndrome confusional, los síntomas neuromusculares y los ictus se asocian con una mayor gravedad y la infección por COVID-19 puede causar síntomas neurológicos persistentes e incapacitantes».