«Las mascotas pueden ser portadoras pasivas de coronavirus, hay que seguir unas normas básicas de higiene»

María Iniesta, veterinaria del Centro Veterinario Trivet, ofrece consejos y recomendaciones a los propietarios de mascotas durante la crisis de coronavirus

María Iniesta es veterinaria en el Centro Veterinario Trivet de Cuenca, clínica que durante la pandemia de coronavirus ha visto modificada su actividad. «Se ha reducido mucho la afluencia de gente porque las personas no pueden salir de casa salvo para lo estrictamente necesario», señala indicando que también han recortado «muchas visitas de medicina preventiva y cirugía selectiva, y sólo estamos atendiendo a animales enfermos».  

No son los únicos cambios que ha tenido que introducir el centro, dado que ahora es obligatorio asistir con cita previa, salvo los casos en los que peligre la vida del animal. El objetivo es evitar aglomeraciones en una sala de espera en la que sólo puede haber dos personas de forma simultánea, y el resto de clientes deben esperar en la calle. 

Además se ha reducido el horario -que ahora es de 9:30 a 14:00 horas- para limitar el tiempo de exposición de unos profesionales que como medidas de protección utilizan siempre mascarilla, guantes y gorro. Asimismo se prescinde de los propietarios en el manejo del animal salvo para los casos en los que sea estrictamente necesario y se han restringido las visitas a los animales hospitalizados. De igual forma, se ha limitado a un único acompañante por mascota y a estos se les ofrece geles de hidroalcohol para la desinfección antes y después de asistir a la clínica. 

En cuanto a las vacunaciones, sí están haciendo las de los cachorros y los recordatorios de las vacunas, así como los animales que llevan muchos años sin vacunarse. «Estamos posponiendo las vacunas a los animales adultos que se han ido vacunando religiosamente todos los años», apunta la veterinaria. 

Consejos para los propietarios de mascotas

En declaraciones a Voces de Cuenca, Iniesta ha ofrecido algunos consejos para los propietarios de mascotas durante esta situación extraordinaria. «Quiero dejar claro que todavía no se ha demostrado que las mascotas padezcan o transmitan el virus de forma activa, pero sí que se ha visto que pueden ser portadores pasivos, igual que puede ser el pomo de una puerta o el mango de un carrito de la compra», matiza.

«Hay que limitar el acceso de los animales al exterior, y de ahí que los paseos sean cortos y el tiempo justo y necesario. En el caso de los gatos que salen al exterior, también hay que limitar el acceso». En cuanto a los perros que tienen que salir a la calle, recomienda lavar con agua y jabón las patas, «nada de alcohol, lejía ni gel hidroalcohólico. Simplemente lavar las patas con agua y jabón y luego sacarlas bien». Además, «tenemos que lavar las manos bien siempre antes y después de tocar a los animales, y evitemos tocarnos la cara si no nos las hemos lavado». 

La veterinaria recomienda a los dueños de los perros que sigan una serie de unas normas básicas, como evitar totalmente el contacto con otros perros. «Hay que apartarse y evitar el contacto entre perros, y es importante no pegar un tirón de correa para quitar al perro, porque luego puede tener consecuencias negativas y que cojan miedo a las personas o a otros perros. Los propietarios deben prever la situación y redirigir al animal con un premio o una llamada», señala. También recomienda «sacar a los perros a pasear con una correa un poco más larga para permitir un poco más de libertad, favorecer el olfateo y se puedan cansar un poquito durante ese paseo corto».

En el caso de que una persona tenga síntomas respiratorios sin saber si es positivo por COVID-19 «debería mantener la distancia con sus propias mascotas dentro del hogar, intentando interactuar lo menos posible y usando mascarilla en su presencia para evitar dejar el virus sobre el animal y que luego lo pueda contraer otra persona». En este supuesto habría que ser incluso más estrictos con el lavado de las manos «y nunca poner la mascarilla a la mascota, como se ha podido ver en algunos vídeos por internet, porque no sirve de nada y sólo les va a generar estrés».    

«Lo ideal para las personas que sean positivos confirmados por COVID-19 es que intenten dejar a otra persona el cuidado de la mascota, sobre todo, porque no pueden salir a la calle a pasear al perro. Hay protectoras que se están haciendo cargo y a las que se puede recurrir en el caso de no tener familiares y amigos», destaca. Cuando se hace el traspaso del animal «hay que utilizar utensilios nuevos, como la correa, comedero y bebedero, y si no se pueden adquirir nuevos sí que hay que desinfectarlos muy bien antes de dárselos a la otra persona». 

El confinamiento «también puede generar ansiedad o estrés en la mascota», según señala la veterinaria, que destaca que «se debe favorecer la independencia de las mascotas en la casa, que se acostumbren también a estar solos. No puede ser que se acostumbren a que estemos 24 horas con ellos y que de repente volvamos a la normalidad y vuelvan a estar diez horas solos. Eso les puede generar un efecto rebote, y es bueno dejarlo solos también durante el confinamiento». Además, cree que es importante «no agobiar a los animales, tener cuidado con que los niños no estén todo el día con el perro», y propone «juegos de olfato para tener al animal entretenido en casa, ya que no lo podemos cansar físicamente, al menos sí mentalmente. Esto le va a ir muy bien».  

A disposición de la Sanidad

Desde el primer momento en el que se declaró el estado de alarma, la clínica declaró de forma altruista el material del que disponía y que pudiera servir al Hospital Virgen de la Luz. «El Colegio de Médicos contactó la semana pasada con el Colegio de Veterinarios para ver qué podíamos dar e hicimos inventario de todo lo que podíamos ceder, como mascarillas, guantes, batas, calzas y gafas nasales para administrar oxígeno y lo dimos directamente», señala Iniesta.

También pusieron a disposición del centro hospitalario su máquina de anestesia y su concentrador de oxígeno. Según apunta, en su caso «el respirador va integrado dentro de la máquina de anestesia. Es una máquina de anestesiar humana que se puede utilizar perfectamente sin necesidad de ningún adaptador, y al día siguiente lo recogieron y se lo llevaron al Hospital». «Con esta cesión hay actividades que hemos tenido que dejar de realizar, como por ejemplo algunas cirugías que tenemos que derivar a otras clínicas», explica.   

Iniesta recalca que en el caso de ser necesarios, los veterinarios se unirían al sector sanitario, y que «de hecho ha habido algunas comunidades autónomas que han pedido voluntarios y por ejemplo en la Comunidad de Madrid hay veterinarios que están colaborando, de momento sólo para recoger muestras y procesarlas en laboratorio». En este punto, aclara que espera «que no se ponga tan mal la cosa, pero llegado el caso podríamos hacer intervenciones más fuertes, estamos capacitados para ello». 

Apoyo al sector primario

La veterinaria ha puesto en valor algunos de los aspectos menos conocidos de su profesión por la sociedad en general que se siguen desarrollando durante estos días. «La Veterinaria está considerada como actividad esencial durante esta crisis porque, por ejemplo, revisa toda la alimentación que procede de la ganadería o pesca, y que garantiza que los alimentos se puedan comer», subraya. 

En este punto, destaca que «hay que asegurar que los niveles de producción se mantengan al ritmo de consumo, porque estamos comiendo exactamente lo mismo que antes, o incluso más». Es por eso que «los veterinarios están al pie del cañón tanto en los mataderos como en las industrias de fabricación y elaboración de alimentos. También en restauración y supermercados: ahora por ejemplo los hoteles y restaurantes están cerrados, pero en los comedores se siguen realizando las inspecciones sanitarias para evitar brotes como el que hubo el año pasado con la listeriosis en la carne mechada».  

Otra de las funciones de los veterinarios que resalta está en los grupos de trabajo científicos, donde «se está investigando sobre qué es el COVID-19 y los tratamientos que se pueden aplicar. De hecho se está probando si pueden servir en la lucha contra el coronavirus algunos de los medicamentos retrovirales que se usan en mascotas». 

María Iniesta
María Iniesta