Escenario de lujo para Estival Clásico: Antonio Serrano y Constanza Lechner en la Catedral de Cuenca

La cena-concierto del festival embelesó este viernes los cinco sentidos de los más de 120 asistentes en el Parador

Estival Cuenca prepara este sábado su propuesta más clásica en un escenario ideal y cargado de belleza arquitectónica como el Patio de la Limosna del Claustro de la Catedral de Cuenca. En este inigualable espacio, el ciclo musical y artístico conquense presentará el concierto de Antonio Serrano y Constanza Lechner.

Un concierto cargado del repertorio clásico de compositores españoles y latinoamericanos del siglo XX. El programa incluirá piezas icónicas como «Recuerdos de la Alhambra» de Tárrega, «Danza española nº 5» de Granados, «Zapateado» y «Playera» de Sarasate, y obras de Falla, Guastavino y Piazzolla, entre otras sorpresas musicales. Todo un panorama de lujo musical.

Antonio Serrano ha colaborado a lo largo de su carrera con músicos nacionales e internacionales, como Paco de Lucía, Tomatito, Joaquín Sabina, Estopa, Ana Belén y Víctor Manuel, entre otros. Además, ha trabajado con reconocidas orquestas sinfónicas y ha realizado grabaciones con prestigiosas agrupaciones musicales. Asimismo, el festival hará entrega al músico y virtuoso de la armónica del premio Solán de Cabras 2023 a la trayectoria musical. El reconocimiento toma la forma de una escultura original en barro creado por el renombrado artista conquense Tomás Bux.

Constanza Lechner, reconocida por su versatilidad y maestría en el piano, ha colaborado con diversos artistas y ha realizado giras internacionales en numerosos países. Su participación en este concierto promete una combinación única de talento y pasión musical.

Las entradas para Estival Clásico pueden adquirirse a través de la plataforma Entradium o en este enlace: https://entradium.com/es/events/estival-catedral-antonio-serrano-constanza-lechner

Música y gastronomía conquenses se elevan mutuamente

Con los focos apuntando hacia Cuenca dada su condición en 2023 de Capital Española de la Gastronomía, Estival Cuenca recordó este viernes la importancia de fusionar lo mejor de las obras de artes surgidas del chef del Parador de Cuenca, Miguel Ángel Martínez, con el espectacular espacio que ofrece el escenario Solán de Cabras en el parador conquense -con vistas a la Hoz del Huécar, el puente San Pablo y las Casas Colgadas- junto a interpretaciones de gran calidad, pero con acento local.

Podrá sonar repetitivo para quien lo haya oído de anteriores ediciones, pero lo cierto es que uno no deja de experimentar novedad en lo que ya es una tradición: el espacio gastronómico de Estival Cuenca. En esta ocasión, movido además por todo ese áurea de explosión gastronómica que luce la ciudad este año, el Parador de Cuenca amplió su aforo hasta los 120 comensales que disfrutaron con los cinco sentidos de una tarde-noche espectacular.

Miguel Ángel Martínez volvió a desarrollar una exquisita selección de pinchos hechos para saltar de un continente a otro de las papilas gustativas de los presentes, tal y como hizo el duo Heritage con la amplia selección de canciones de autoras, predecidas siempre por el pedacito de historia que las llevó hasta su repertorio.

De esta forma, los quesos manchegos D.O., el micuit de pato y tatín de manzana, la trucha del Júcar maridada con encurtidos y sus huevas hasta el brioche de lomo de orza, rúcula y lascas de queso, pasando por composiciones de nomenclatura más reducida, como la receta propia de patatas bravas del chef y las croquetas de jamón ibérico, se entrelazaron con canciones como “Que te vaya bonito”, “La llorona”, “María la portuguesa” o poemas de Federico García Lorca como el “Zorongo gitano”.