El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) ha informado que durante los meses de marzo, abril y mayo la provincia de Cuenca ha registrado 864 licencias de enterramiento de las cuales 507 (58,7%) recogen como causa del fallecimiento COVID o sospecha compatible con COVID, referenciando como sospecha aquellos supuestos en los que se recoge dicha probabilidad o sospecha en la certificación médica o existen motivos para ello por concurrir procesos patológicos de tipo pulmonar compatibles con dicha causa.
En marzo se contabilizaron en territorio conquense un total de 320 defunciones, 398 en abril y 146 el pasado mes de mayo. De ellas, estaban vinculadas con el coronavirus 189 en marzo, 270 en abril y y 48 en mayo.
En el caso de Castilla-La Mancha, el número de licencias expedidas en estos tres meses fueron 8.799 de las cuales 5.125 están vinculadas con el coronavirus, lo que supone un 58,2& del total. Abril ha sido el mes con más defunciones (3.902) seguido de marzo (3.458) y mayo (1.438).
Datos de mayo
Por su parte, en relación al pasado mes de mayo, las defunciones en la capital conquense han aumentado un 62% respecto a las inscritas en el mismo periodo del año anterior. Los registros civiles han expedido 81 licencias de enterramiento en la ciudad cuando en el mismo mes de 2019 se registraron 50 defunciones. De las 81 defunciones registradas el mes pasado, en 31 (38,3%) se recoge como causa del fallecimiento COVID o sospecha compatible con COVID.
En el caso de la provincia de Cuenca cambia la tendencia y el TSJCM ha registrado un descenso del 28,4% en las licencias de enterramiento pasando de las 204 contabilizadas en mayo del año anterior frente a 146 del mes pasado, de las cuales 48 (32,9%) están vinculadas con la COVID-19.
El patrón respecto al mes anterior ha sido común en Castilla-La Mancha. Así, mientras el número de defunciones registradas en mayo ha disminuido en todas las provincias de la región (desde el 5% de Albacete hasta el 28,4% de Cuenca), en las capitales ha aumentado hasta cotas como las de Toledo donde las licencias de enterramiento se han incrementado un 340% respecto al mismo mes del año pasado. A continuación se sitúan las capitales de Ciudad Real (189%), Guadalajara (152%), Cuenca (62%) y Albacete (38%).
Panorama regional
Las defunciones en Castilla-La Mancha en mayo de 2020 han disminuido un 10,8 % con respecto a las inscritas en el mismo periodo del año anterior. Los registros civiles de Castilla-La Mancha han expedido el pasado mes de mayo 1.439 licencias de enterramiento cuando en el mismo mes de 2019 se registraron 1.614 defunciones. Y de ese número de 1.439, en 456 licencias de enterramiento, el 31,7 %, se recoge como causa del fallecimiento COVID o sospecha compatible con COVID.
Al margen de este dato, la reducción en el número de expedición de licencias de enterramiento en la región durante el mes de mayo también ha sido significativa con respecto a los meses de marzo y abril de 2020. Concretamente el descenso con respecto al mes de abril es del 63,1 % (3.902 licencias enterramiento en abril frente a 1.439 de mayo). En cuanto al porcentaje de disminución en referencia al mes de marzo alcanza el 58,4 % (3.458 licencias de enterramiento en marzo por 1.439 de mayo).