El Colegio Oficial de Enfermería de Cuenca ha sido testigo desde el primer momento de la labor desarrollada por este colectivo en la lucha contra el coronavirus. Tras dos meses de trabajo combatiendo la pandemia sus efectos han dejado huella en forma de contagios. Los enfermeras y enfermeros son el colectvo de profesionales sanitarios más afectados. José Luis Pérez, portavoz del Colegio profesional en Cuenca, afirma que «el 22% del total de las personas contagiadas en España son profesionales sanitarios y el 60% de ellos son personal de enfermería. Es decir, hay aproximadamente 31.000 enfermeras infectadas de COVID-19»
¿Cómo han vivido los enfermeros y enfermeras conquenses la crisis sanitaria? ¿Cómo la han afrontado?
La enfermería ha afrontado esta pandemia de una forma muy valiente, lo ha dado todo, ha respondido maravillosamente bien y con una entrega total. De hecho, el número de sanitarios afectados a nivel nacional es tremendo. Son 51.000 sanitarios contagiados que suponen el 22% del contagio total del país. Y 60% de los sanitarios son personal de enfermería. Es decir, aproximadamente 31.000 enfermeras infectadas de COVID-19. La gente ahora mismo está cansada y fatigada. Ya no está tan asustada como al principio porque esto era nuevo para todos y hemos aprendido a convivir con la enfermedad y a enfrentarnos a ella. Cuando hablas con la gente, está reventada. Porque, claro, hay un stress y un esfuerzo físico importantísimo.
Han sido muchas jornadas de tensión continuada, ¿no?. Un día, y otro….
Efectivamente. Y gracias a Dios ya se está rebajando el número de afectados y fallecimientos pero nos gustaría poder transmitir a la gente un mensaje: no podemos echar por tierra el trabajo que hemos hecho hasta ahora. Ha sido un trabajo ímprobo, por parte de todos, quedándonos en nuestras casas, los sanitarios enfrentándonos casi sin escudo… Es un tema que nos pilló a contrapié a todos: sanitarios, administración, países, gobiernos…y pediría, por favor, a la gente que sea responsable y sigamos con las medidas de protección en los meses que vienen por delante.
¿Qué es lo que más ha echado de menos el colectivo de enfermería cuando miramos a hacia atrás y hacemos balance de lo que ha ocurrido?
Hubo un informe del Pentágono hace más de diez años y de la Organización Mundial de la Salud diciendo que era muy posible que un día se produjera una epidemia vinculada a un virus respiratorio. Pero esto es como el cuento de Pedro y el Lobo, que viene el lobo, que viene el lobo y no viene…hasta que viene y nos pilla a todos con la guardia baja. Ningún país ha reaccionado bien menos aquellos que tenían experiencia con este tipo de virus, como en Asia, que pasaron el SARS y el MERS. ¿Qué país tenía suficiente número de EPIS, mascarillas, … ?Prácticamente nadie. Esta situación ebe serir, y estoy convencido de que servirá, para que los Gobienros de los países hagan una previsión de medios para enfrentarse a estas situaciones de una forma distinta. En España hemos tenido dos cosas. La primera y principal, la falta de material. No pensábamos que nos íbamos a enfrentar a una situación así. Y también, los recortes que hubo en Sanidad han ido redundando en una disminución de las plantillas que ha hecho enfrentarnos a esta situación, muchas veces, con un ejército muy pequeño. Somos el sexto país de la Unión Europea, por la cola, en número de enfermeras por 1.000 habitantes. A ver si aprendemos que la sanidad tiene que estar bien dotada en medios materiales y humanos para enfrentarnos a crisis de este tipo.
«Somos el sexto país de la Unión Europea, por la cola, en número de enfermeras por 1.000 habitantes. A ver si aprendemos «
¿Ha dispuesto la sanidad conquense de personal de enfermería suficiente para combatir esta crisis sanitaria?
Aquí en Castilla-La Mancha empezaron a contratar gente en cuanto pudieron. Y se han hecho muchos contratos y, la verdad, es que después casi no había ya profesionaes para contratar. Pero no es sólo eso. Cuando las plantillas tienen un número determinado de personas que están asentadas y saben manejar las diferentes tareas no es lo mismo que cuando entra, en un hospital o en Atención Primaria, gente nueva que no tienen esa experiencia. Se ha hecho un esfuerzo por parte de la administración para contratar gente y aquí, en Cuenca, se ha notado. Pero si las plantillas fuesen más amplias, la gente tendría mayor experiencia. No pedimos más de lo que ya hay en otros países. Que haya unas plantillas de enfermeras suficientes y no estemos en la cola como estamos ahora.
¿Cuál es vuesta opinión sobre la figura de la enfermera escolar, de la que tanto se está hablando últimamente?
Llevábamos mucho tiempo reclamando esta figura al ministro de Sanidad. El Consejo General de Enfermería hace tiempo que inició este movimiento porque creemos imprescindible que haya una enfermera, no en cada colegio, sino por número de alumnos. Ahora empezamos a ver su necesidad. En el momento en que empiecen los colegios, el curso próximo, la enfermera podría hacer una labor importantísima en cuidados, en educación sanitaria y en prevención de enfermedades.
¿Cuál es vuestra percepción como profesionales de la enfermería sobre la situación en las residencias de mayores?
Desde el momento en que se privatizan… Hay una legislación sobre el número de enfermras que debe haber pero se ha visto que donde más ha afectado la enfermerdad ha sido en estos centros. En algunos, no en todos evidentemente, la gestión no ha sido lo suficientemente buena como para que nuestros mayores estén bien atendidos. Las estadísticas lo dicen, las residencias privadas han tenido muchísimos más problemas que las públicas porque estñan dotadas con menos personal y con menos medios materiales.
«Los recortes que hubo en sanidad y la falta de material han pesado a la hora de afrontar la pandemia»
¿Desde el Colegio de Enfermería habéis planteado alguna medida específica para paliar los efectos de la COVID-19?
Aparte de los mensajes de ánimo y solidaridad, en cuanto pudimos y las empresas dispusieron de material de protección, junto al Colegio de Médicos distribuimos este tipo de artículos de protección allí donde había más necesidades. Y uno de los lugares donde más necesidades descubrimos fue en las residencias de mayores y enviamos material para que las enfermeras trabajaran con la mayor seguridad. Pero esto fue cuando encontramos material porque hubo un momento, al principio, que no se encontraba este material.
En el caso de la provincia de Cuenca…¿Están dimensionadas correctamente las plantillas para atender las necesidades existentes?
En un futuro, seguramente, lo que haya que reforzar sea la Atención Primaria porque va a ser donde recaiga el seguimiento del coronavirus. Se va a intentar que la Atención Primaria sea un filtro donde se puedan detectar los pacientes contagiados cuanto antes para ponerlos en cuarentena y, en tratamiento, a quien sea necesario. Y sólo vayan al hospital las personas con un problema diagnosticado previamente en Atención Primaria. Por tanto, médicos y enfermeras de Atención Primaria tiene a a partir de ahora un trabajo muy importante. Y no olvidemos que este trabajo también recae en otro personal como administrativos, celadores… Sí habrá que potenciar la Atención Primaria. Por lo que tengo entendido, la Consejería de Sanidad ha mantenido todos los contratos que ha habido con el coronavirus y que tienen la intención de potenciar los centros de salud para hacer esta búsqueda de pacientes positivos.
