“Hay que ver hacia donde queremos ir. Lo que hace dos años parecía lógico quizá ahora no lo sea tanto”

Entrevista del domingo con César Sánchez, vicerrector de Cultura, Deportes, Responsabilidad Social y del Campus de Cuenca

César Sánchez es el nuevo vicerrector de Cultura, Deportes, Responsabilidad Social y del Campus de Cuenca de la UCLM. Hombre de dilatada experiencia en la universidad regional, de la que fue director académico del campus conquense y posteriormente director de la Politécnica, Sánchez ha renunciado al acta de concejal del consistorio de nuestra ciudad obtenida por Cuenca nos Une y en el que formaba parte del equipo de gobierno municipal. En esta entrevista Sánchez aborda cuestiones de relevancia para la UCLM, los retos y objetivos a los que se enfrenta nuestro campus y especialmente el cambio de paradigma en la universidad que ha traído consigo una pandemia que en muchos aspectos ha cambiado la vida y los estudios universitarios.

¿Qué supone para usted haber sido nombrado vicerrector del Campus de Cuenca?

Una mezcla de orgullo, porque esta es mi casa, mucho respeto, porque conozco las competencias que asumo ya que estuve ocho años en el vicerrectorado como director académico, y compromiso, porque vengo de una etapa anterior de servicio público y lo que hago es trasladar y reforzar ese compromiso.

En una entrevista que publicamos con Julián Garde antes de las elecciones afirmó que él tenía en la cabeza quién quería que fuera la persona a la que pondría al frente de este vicerrectorado pero que ni siquiera había hablado con el interesado o interesada. ¿Cuándo habló con usted el nuevo rector para ofrecerle el puesto?

Fue así, no habló conmigo hasta después de las elecciones, yo tomé posesión el día 23 y fue muy pocos días antes. Una vez que el nuevo rector ganó las elecciones y unos días antes de su nombramiento oficial fue cuando empezó a llamar a los distintos candidatos a encabezar los vicerrectorados.

“Ahora mismo el propósito y objetivo general es mantener la excelencia de esta universidad y ser creativos porque lo que hemos visto durante este último año es que todo está cambiando y por supuesto la formación también”

¿Le pilló de sorpresa o era algo que se podía imaginar?

Me pilló de sorpresa. Otras veces he formado parte del proceso, haciendo campaña por algún candidato y siendo la cara visible en Cuenca de alguna candidatura, pero en esta ocasión estaba centrado en mi desempeño como concejal y bastante alejado del día a día de la campaña. Mi relación Julián siempre ha sido excelente, incluso en otras ocasiones cuando digamos que éramos «adversarios» en las elecciones, pero sí que fue una sorpresa porque no lo estaba buscando como otras veces. En cualquier caso mantengo mi compromiso con la ciudad, de hecho Julián Garde ha insistido en que su intención es reforzar ese compromiso de la UCLM con nuestra ciudad y mi intención es seguir en esa línea pero desde otra institución como la UCLM que es mi casa desde hace muchos años y desde donde creo que también se pueden hacer muchas cosas por Cuenca, tanto por el número de personas que hay en el campus como por lo que supone tener una institución como la UCLM en la ciudad. Hay muchos proyectos en marcha del Ayuntamiento que vamos a seguir apoyando desde otras competencias pero con el mismo sentido de servicio público.

Aunque lleva muy poco tiempo en el cargo sí que tiene una experiencia muy dilatada de lo que es y de lo que necesita el campus de Cuenca. ¿Cuáles son las necesidades más urgentes que hay que abordar en este campus?

Este vicerrectorado tiene varias competencias, por un lado yo ejerzo la representación del rector en el campus de Cuenca pero también tenemos competencias sobre toda la UCLM en cultura, deportes y ahora en responsabilidad social. Estas son competencias de extensión universitaria, no es la línea más clásica que tenemos en mente cuando pensamos en una universidad, que es la docencia y la investigación, pero son unas competencias esenciales para el desarrollo de cualquier profesional, el paso por la universidad es un proceso vital que conforma a la persona y a los profesionales y para ello la cultura, el deporte y la responsabilidad social son las que completan a esos buenos profesionales. Creo que hay reforzar esa línea, tenerla muy presente y ponerla en valor no sólo en Cuenca sino en todos los campus. Y respecto al campus de Cuenca creo que ahora mismo el propósito y objetivo general es mantener la excelencia de esta universidad y ser creativos porque lo que hemos visto durante este último año es que todo está cambiando y por supuesto la formación también. Hemos entrado en un periodo de reflexión en cuanto a la realización de los estudios universitarios, el planteamiento de los mismos, las necesidades de los nuevos perfiles profesionales y lo que seguramente hace dos años pensábamos que era totalmente válido ahora hay que plantearlo en este nuevo contexto. Nuestro principal objetivo es mirar al futuro con las máximas flexibilidad y creatividad para adaptarnos a esta nueva situación que ha sido una bofetada de realidad para todos. De las crisis hay que sacar nuevos planteamientos que hay que profundizar en ellos y mejorarlos.

Las crisis también cambian la visión de los estudiantes de las distintas carreras que pueden cursar. Tenemos un ejemplo muy claro en lo que tiene que ver con lo que ocurrió después de la crisis inmobiliaria y cómo carreras como Arquitectura y otras, que antes eran demandadísimas, ahora tienen un interés mucho menor. ¿Esta crisis que estamos viviendo cree que puede influir tanto en cuanto a los estudios como en la forma de impartirlos y recibirlos?

Sí, creo que es una nueva concepción de la enseñanza universitaria. En primer lugar está el debate sobre la presencialidad, que es un tema importante pero del que no se puede hablar de una forma genérica porque hay estudios como Arquitectura Técnica que obligatoriamente requieren una presencialidad porque son carreras muy experimentales, así que hay que plantear la nueva visión de la universidad de una forma muy flexible. Estos vaivenes en el interés de los alumnos en ciertos estudios siempre se han producido. Cuando yo estudié las facultades de medicina estaban vacías y eso es algo impensable ahora mismo, son valles, subidas y bajadas que dependen de lo que demanda la sociedad y la universidad tiene que estar atenta para, sin perder su esencia, adaptarse a las nuevas situaciones en todos los sentidos. Desde luego la docencia llevamos tiempo viendo que ha cambiado, nosotros en la UCLM vimos que había posibilidades de adaptarnos a esos cambios y ahora tenemos que ver en qué punto medio nos quedamos entre presencialidad y virtualidad.

¿Hacia dónde cree que puede bascular el interés de los futuros alumnos de la UCLM y concretamente del campus de Cuenca?

Muchas veces pensamos en el interés de los estudiantes pero hay muchas carreras que son tremendamente vocacionales, vemos que hay perfiles que son muy demandados por las empresas pero nosotros también como servicio público tenemos que dar salida y cabida a esos perfiles que a lo mejor no son tan demandados desde el punto de vista profesional pero que sí que lo son por la propia sociedad y tenemos que llegar a un punto de equilibrio entre ambos. Lo que demanda la empresa ya sabemos qué es: perfiles tecnológicos muy relacionados con las matemáticas, pero los perfiles humanísticos relacionados con estos perfiles tecnológicos son las profesiones del futuro, a lo mejor no perfiles muy encajonados en un área sino transversales en distintas áreas, eso es lo que reclaman las empresas y la complementariedad entre estudios seguramente será las líneas que la universidad del futuro tenga que plantear.

“Hay que hacer un plan de comunicación. Creo que siempre hemos tenido ese debe de comunicarle bien a la sociedad lo que estamos haciendo y hacerlo de una forma organizada y coordinada”

En esa entrevista con Julián Garde a la que me he referido antes manifestó que a la UCLM se la tenía que conocer más. ¿Cómo se puede mejorar la comunicación con la sociedad y que se conozca mejor?

Hay que hacer un plan de comunicación. Ambas candidaturas coincidían en eso y Julián Garde ha creado un vicerrectorado de Comunicación y Coordinación. Creo que siempre hemos tenido ese debe de comunicarle bien a la sociedad lo que estamos haciendo y hacerlo de una forma organizada y coordinada por lo que la creación de ese vicerrectorado era algo muy necesario. Siempre he dicho que los ciudadanos en general se sorprenderían con las líneas de investigación que se llevan a cabo en nuestra universidad y eso hay que ponerlo en valor, gente de Cuenca que está trabajando y haciendo cosas muy interesantes y es importante que los ciudadanos lo conozcan.

También afirmaba que la UCLM tiene el deber de contribuir a la resolución de los problemas de la región y en el caso del campus de Cuenca lógicamente de la ciudad y la provincia. ¿De qué manera cree que esto realmente puede ser un objetivo cumplible?

Durante mi etapa de concejal uno de las competencias que tenía era la de promoción empresarial y uno de los grandes bienes en cuanto a recursos materiales y humanos que yo ponía encima de la mesa cuando hablaba con potenciales inversores era este, los recursos humanos y la formación específica que podía aportar la UCLM para mejorar esos proyectos. Uno de los que nos tiene que servir de referencia es el proyecto UFIL, que es una incubadora de bioeconomía forestal que es un ejemplo perfecto de colaboración entre administraciones y en el que la Universidad ha aportado mucho. Y otro ejemplo de colaboración entre administraciones es el nuevo Parque Científico y Tecnológico que llevará asociado un centro de de desarrollo científico y tecnológico de economía circular, en el que ya se iniciaron los contactos y el propio rector se puso a disposición de las administraciones para desarrollar lo que corresponde. Somos el principal centro de investigación de la región y es lógico pensar que en ese parque, y así va a ser seguramente, la UCLM tenga un papel de apoyo importante. Y de igual forma esto hay que hacerlo con todos los proyectos interesantes en los que se embarque esta ciudad y esta provincia.

¿En cuestión de infraestructuras del campus de Cuenca qué es lo más urgente que se debe acometer?

En cuanto a grandes infraestructuras no hay muchas previstas excepto el ágora, que se proyecto hace unos años con fondos europeos en un contexto de universidad muy distinto al de ahora. Sí que es cierto que dentro de este nuevo paradigma de universidad hay que replantear muchas cosas y que la UCLM ha hecho un gran esfuerzo para adecuar sus instalaciones e infraestructuras de forma general al nuevo concepto COVID. En ese sentido la inversión ha sido brutal y estamos bastante preparados. Hay que ver qué pasa con las nuevas titulaciones y nuevos espacios y hay posibilidades en los terrenos que hay detrás de la Politécnica pero tenemos que ver exactamente hacia donde queremos ir porque lo que hace dos años parecía muy lógico quizá no lo sea ahora tanto, por eso yo sería prudente en cuanto a infraestructuras para ver realmente hacia qué estrategia de universidad queremos movernos.

Ya sabe que muchas veces los conquenses nos quejamos de que determinados estudios no llegan a Cuenca y demandamos la implantación de determinados estudios que den más relevancia a nuestro campus. ¿Qué nos puede decir sobre estas demandas que siempre están sobre la mesa?

Hace años se estableció un plan estratégico con la Junta de Comunidades en el que se planteaba una serie de implantaciones en los distintos campus que se desarrolló en su primera fase y luego se paró un poco. Ahora mismo, como he dicho antes, estamos en otra situación y el consejo social tiene que valorar si ese plan de crecimiento es el lógico en este nuevo mundo que nos toca vivir. Había un mapa de titulaciones que quedó en suspenso y lo que hay que hacer es replantearlo con el nuevo consejo de gobierno y el nuevo consejo social así que de momento no ha planteamientos iniciales salvo estabilizar y conseguir la excelencia en las titulaciones han sufrido este último año y seguir trabajando en la acreditaciones europeas de las distintas titulaciones antes de pensar en nuevas titulaciones. Y lo que también tenemos que seguir desarrollando, que no estaba incluido en el plan, es la formación específica de másteres y postgrado.

Por último me gustaría que me hiciera una valoración del anterior equipo del vicerrectorado de Cuenca.

Yo he sido crítico con el anterior equipo de gobierno porque me he presentado dos veces a las elecciones con otras ideas de gobierno y universidad. He defendido un modelo distinto y hay cosas con las que no estaba de acuerdo, pero también entiendo que el anterior equipo ha vivido unos momentos muy complejos, con una reducción presupuestaria muy importante. Yo hubiera hecho muchas cosas de forma distinta pero creo que hay cosas que sí que han hecho bien, y en concreto pasar en 48 horas de un modelo presencial a uno virtual, aunque con deficiencias y problemas, es algo que hay que poner en valor y reconocer. Y lo que sí quiero dejar claro es que la transferencia que se ha hecho entre los dos equipos ha sido impecable y que me han tratado infinitamente bien.