La reapertura de la escuela de Fuentelespino de Haro, a primera fila del debate en el primer día de clase

Junta de Comunidades y Ayuntamiento ofrecen versiones contradictorias sobre la situación del centro docente, que dispone de siete solicitudes para volver a funcionar

La escuela de Fuentelespino de Moya y su posible reapertura tras seis años cerrada se ha situado en el centro del debate educativo en el primer día del curso escolar entre administraciones de distinto signo político. La delegada provincial de la Junta de Comunidades, Mª Ángeles Martínez, asegura que el Gobierno regional está dispuesto a poner en marcha de nuevo esta infraestructura educativa y reclama que «el Ayuntamiento debe acelerar los tiempos para acometer las mejoras necesarias para la apertura de ese centro». Por su parte, el alcalde de Fuentelespino de Haro y presidente provincial del PP, Benjamín Prieto, asegura que la inspección de la Junta de Comunidades ha certificado que las instalaciones están listas para su uso.

Desde el Gobierno regional, la delegada provincial ha recordado que Fuentelespino de Haro se cerró en 2014 con 11 alumnos. «Ahora tenemos siete solicitudes. Vamos a agilizar la apertura todo lo posible pero también solicito al Ayuntamiento que haga las labores que le corresponden, es decir, adecuar las instalaciones de la escuela que, hasta el momento, no están hechas. Si la Consejería acelera los tiempos para poder prestar el servicio, el Ayuntamiento también debe acelerar esos tiempos de acometer las mejoras necesarias para la apertura de ese centro. Es decir, pintar que tampoco es mucho más».

Prieto, por su parte, ha resaltado que resulta «lamentable que una directora provincial que ha estado desaparecida durante meses, en vez de ser ella y su gobierno regional quienes detecten los problemas educativos que tiene nuestra provincia y ponga en marcha las soluciones esté más pendiente de entorpecer y buscar excusas a peticiones y propuestas totalmente coherentes”. Estas mismas fuentes han indicado que «han tenido que ser los padres, ante la inacción de un Gobierno regional, los han decidido que para que sus hijos tengan más seguridad y más medios se abra un espacio nuevo cuando debería de haber sido al contrario, que la Junta de Comunidades estuviera llamando a Ayuntamientos de la provincia para descongestionar aulas”, explicaba el alcalde de Fuentelespino de Haro, quien relataba como su Ayuntamiento, “desde el mismo momento en el que los padres nos lo comunicaron nos pusimos a trabajar”.

Plazos

Mª Ángeles Martínez , representante del Gobierno regional, se ha mostrado convencida de que «Fuenlespino de Haro abrirá si el alcalde cumple con sus obligaciones. Entiendo que todos los alcaldes quieran abrir las escuelas en sus pueblos pero sí me gustaría destacar la circunstancia tan especial que se nos presenta en Fuentelespino de Haro. Presentar un 25 de agosto la solicitud de un alcalde de un pueblo no tan grande que sabe que tiene alumnos interesados en abrir la escuela…rogaría a aquellos alcaldes que estén en esta situación que no jueguen hasta el último minuto porque la Consejería tiene que organizar muchas cuestiones para la apertura de un centro. Y presentar la solicitud en 25 de agosto es llevar a la Consejería al límite. No obstante, a pesar de ello vamos a hacer todos los esfuerzos por reabrir el centro. Las políticas educativas de este Gobierno son muy diferentes a las que entonces cuando se cerraban 36 escuelas en la provincia de Cuenca».

El primer edil y máximo responsable provincial del PP afirma, sin embargo, que “quien está desnortado y desconcertado es el Gobierno Regional que en el día de ayer no sabía en el CRA al que pertenece el colegio de Fuentelespino de Haro si podían mandar o no un profesor, no hay ninguna coordinación por parte de los responsables directivos de la Junta porque desde mitad de agosto que tuvieron noticia de que los padres querían volver a llevar a sus hijos al colegio del municipio podían haber contactado con el Ayuntamiento y con los padres porque a día de ayer no sabían dónde debían de llevar a sus hijos”, reitera Prieto, “este caso no es más que otro ejemplo de la inoperancia de la Junta y lo han pagado siete niños que no han podido ir a clase y sus padres”, ha concluido.