Desde el año 2000 hasta 2021 han nacido en la provincia de Cuenca un total de 34.690 personas, mientras que han fallecido 52.324, lo que supone que han muerto 17.634 personas más de las que han venido al mundo, es decir que las defunciones son superiores a los nacimientos en lo que va de siglo en un 50,57% según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística.
En este tiempo, el año con peor saldo entre nacimientos y defunciones es el pasado 2020 con motivo del COVID con 1.984 muertes más que alumbramientos, pero 2021 es el segundo con peor saldo con 1.139 más decesos que personas nacidas, lo que supone que las muertes son superiores en un 97,61% en este ejercicio.
En el año 2021 han nacido en Cuenca un total de 1.300 personas, lo que es la segunda cifra más baja de nacimientos de todo el siglo solo por detrás de las 1.193 del 2020, en el que el COVID también pudo paralizar esta estadística. Por su parte, las defunciones registradas el año pasado han sido 2.439, muy por debajo de las 3.177 del año 2020, pero en la línea de las cifras de 2018 y 2019.
Análisis de la Confederación de Empresarios de Cuenca
La Confederación de Empresarios de Cuenca incide en que las defunciones en la provincia de Cuenca siguen muy por encima de los nacimientos y lo achaca principalmente a que la provincia tiene una población altamente envejecida.
La Comisión de Lucha contra la Despoblación de CEOE CEPYME Cuenca ha analizado estos datos de indicadores demográficos básicos del INE y los ha cruzado con otros que posee como el hecho de que el 23,5% de sus habitantes tienen 65 años o más según el padrón y concluye que está dentro de lo esperado que las defunciones superen a los nacimientos.
Para CEOE CEPYME Cuenca estas cifras son complicadas de remontar, pero al menos señala que con políticas que estimulen la fijación de población en zonas rurales y la instalación de empresas se conseguirá atraer más gente joven y hacer crecer los nacimientos.
