Las enseñanzas del chuletón

Nicolás Poveda Peñas- Exmagistrado conquense de la Audiencia Nacional

Anda el país y la ciudadanía atónita y sorprendidísima por un problema muy grave que afecta al Consejo de ministros, y que incluso, algunos enterados ya lo han dicho en medios diversos, puede afectar a la gobernabilidad del Estado, si es que a esto que sufrimos se le puede llamar gobierno de algo.

No tenía otra cosa que hacer el ministro Garzón entre sus muchos cometidos y competencias. Garzón no el abogado, sino otro del mismo nombre, pero con distintos gustos, que arremeter desde su alta autoridad contra el filete de carne, y mas en concreto de vacuno, y no sabemos bien por qué lo dijo, ya que al instante se monto el follón, y con el ruido orquestado ya nadie sabe las razones de su Autoridad.

Más lo grave, o por lo menos para mí, lo mas grave, no es que a un ministro se le vaya la olla y diga alguna cosa indecible, sino que, a renglón seguido, el inquilino monclovita, que duda cabe, que asesorado por su Iván, salta como un perro de presa al cuello del pobre ministro, para indicarle que como un chuletón al punto no tiene igual en el mundo, y deja al ministro a los pies de los caballos por no decir que listo de papeles.

Es evidente que este país tiene entre sus múltiples y graves problemas, que llevan a muchas familias a no llegar a fin de mes en lo económico, afectados en su salud y sin trabajo, los problemas que Vd. quiera enumerar, que sin duda se va a quedar corto, pero seguro que a nadie se le había ocurrido la idea sublime que se le ocurrió al monclovita del punto que hay que dar a un chuletón.

Es asimismo evidente que él sabe bien el punto que tiene que tener un chuletón, como no, si lo ejerce desde hace tiempo, a pesar de que tenga que salir corriendo de una conferencia en un país báltico al oírse el ruido de un avión que pasaba, luego resulto que al parecer, pues nadie lo ha confirmado que se trataba de un avión ruso, de los rusos de Putin, no de los filetes rusos, que nadie sabe cómo llego hasta allí con la de fuerzas militares que tiene desplegadas la OTAN entre ellas muchos españoles, con el mejor material bélico que nos queda, que es bien es poco, algo ayuda.

Y además nos encontramos con el comentario reiterado en medios de que se trata de un adelanto del cambio ministerial que anuncio el monclovita y que por ahora no ha hecho. Podemos se le puso enfrente y le dijo que nada de nada, buena es ella, ha echado de casa incluso al coletas, y claro está, pues a por el siguiente, Izquierda Unida que forma parte de podemos, pero no pertenece a la estirpe real de esa banda Y en estas estábamos cuando el primero de estos, Garzón saco lo del chuletón y ahí le han pillado.

Vistas así las cosas, puede parecer un sainete de la antigua época, pero la realidad es que se trata de un movimiento político que conlleva un cambio ministerial y por ende un cambio de actuación por el ejecutivo, ya que la continuidad de Garzón en el Consejo es más difícil que la oposición de Abogado del Estado.

Es inadmisible que la gobernanza del Estado dependa de las ocurrencias de un ministro sobre el gusto del chuletón y la forma de cocinarlo, pero esta es la clase gobernante que tenemos y así nos va.

Otros que vamos conociendo desde hace años al tal Iván y a su congénere Pedro, sabemos que esto es un disparo de fogueo para despistar al pueblo ciudadano, al que con lo del chuletón, le van a crujir hasta las trancas en temas como el de las pensiones o el de la vivienda, y lo que es mas grave lo de su libertad, para si y para los suyos, ya que lo que pretenden, no lo olviden es que seamos unos lacayos suyos, a sus órdenes sin poder de disposición alguna.

Sin embargo, olvida que los que en su día hicimos la Constitución Española y peleamos las libertades frente a quien fuera, no nos va a callar un mindundi que le gusta el chuletón al punto. Faltaría más, lo del chuletón lo entendemos por similitud con él, pero lo del punto tiene mucha tela que cortar.