Muebles Evangelio traslada de local su exposición para seguir ofreciendo calidad y buen servicio

La especialización en habitaciones juveniles, descanso y tapicería es lo que distingue a este negocio fundado en 1977 y gestionado actualmente por José Ignacio Evangelio.

Muebles Evangelio, con una trayectoria de casi 45 años en el negocio, cambia de local su exposición pero permaneciendo en la Calle Diego Jiménez, concretamente en el número 14, donde seguirá ofreciendo calidad y buen servicio a sus clientes.

José Ignacio Evangelio continúa en solitario con el negocio que fundó su padre en 1977 y con su profesionalidad en tres grandes sectores del mobiliario en los que se han especializado, habitaciones infantiles y juveniles, descanso y tapicería.

Como explica Evangelio, son conocidos por sus habitaciones juveniles, que realizan a medida con diseños muy atractivos y funcionales.

En cuanto al descanso, un sector al que hoy en día se le presta mucha importancia, destacan por tener la delegación comercial de la marca de colchones Tempur, de origen americano realizado con un exclusivo material.

El nuevo espacio de Muebles Evangelio supone una nueva etapa del negocio, que ha sido testigo de los cambios en gustos y modas en cuanto a decoración; su propietario recuerda que al principio de esta empresa familiar, la gente prefería salones más reservados, mientras que las tendencias han derivado en gustos más vanguardistas y livianos, «se ha notado mucho el efecto Ikea», dice José Ignacio Evangelio.

El mobiliario de oficina también está presente en Muebles Evangelio, desde su fundación cuando abrió su primera exposición en la calle Alicante; los muebles para locales de hostelería, como bares, restaurantes y hoteles es otro de sus puntos fuertes.

Esta tienda de muebles también ha recibido el impacto de la pandemia de dos formas diferentes, con un pequeño repunte en las ventas como consecuencia de las largas estancias en casa por el confinamiento, pero con un descenso por los cierres perimetrales que han impedido que clientes de los pueblos de la provincia viajar hasta la capital o de zonas en las que cuenta con muchos clientes como Madrid y Alicante.

El propietario se muestra optimista y confía en que la economía vuelva a remontar y que tras la pandemia el sector del mueble se revitalice con reformas y acondicionamientos de los hogares.

Evangelio tiene mucha ilusión por continuar con el negocio familiar, que ha superado muchos obstáculos como la crisis de 2008 en la que se vivió un parón de la construcción y a la que no fue ajeno el sector del mueble y de la decoración.