El vandalismo ‘devora’ el colegio San Julián casi tres años después de ser designado sede del CNEP

El Ministerio del Interior hacía pública la decisión en abril de 2021. Actualmente el inmueble sufre un severo proceso de deterioro sin ventanas, persianas y cristales rotos, mobiliario escolar por los suelos....

El Ministerio del Interior hacía público el 22 de abril de 2021 que la ciudad de Cuenca albergaría el futuro Centro Nacional de Estudios Penitenciarios (CNEP) con su sede en el colegio de San Julián. El tiempo ha transcurrido desde entonces, el centro se cerró dejando de ejercer su función docente y los años de abandono han pasado dejando factura al inmueble.

El edificio se encuentra en la actualidad aquejado de un severo deterioro provocado por el vandalismo. La entrada es posible tras haber sido retirada la puerta e incluso la cinta colocada por la Policía Local con la leyenda «no pasar». La fachada ya deja constancia de los destrozos existentes con la ausencia de las ventanas, cristales y persianas que anteriormente se encontraban en su lugar correspondiente. Desde los límites de la parcela también se pueden apreciar todas las puertas forzadas así como gran cantidad de mobiliario escolar que ha sido sacado de su lugar de origen y desparramado por el exterior.

El proceso para transformar el antiguo colegio en sede del Centro de Estudios Penitenciarios arrancó poco después de hacerse pública la decisión pero su materialización se ha ido dilatando y ha obligado a que la formación de los funcionarios de prisiones se haya tenido que realizar en instalaciones de la UCLM. El Consejo de Ministros aprobaba en noviembre de 2022 una inversión de 11,3 millones para el Centro Nacional de Estudios Penitenciarios. La aportación estaba destinada a remodelar el colegio de San Julián y convertirlo en sede definitiva.