La Diputación de Cuenca aún no tiene fechas, ni siquiera aproximadas, para el traslado de las oficinas del Organismo Autónomo de Gestión Tributaria y Recaudación desde su emplazamiento actual de la calle de Las Torres (edificio del antiguo ICONA) hasta el local adquirido para tal fin por 520.000 euros en la calle Diego Jiménez de la capital conquense.
«No hay ninguna novedad», indican fuentes de la institución provincial. Recuerdan que, antes del cambio ,la Diputación desea reformar y adaptar el inmueble. Entre las reformas que requieren se encuentra el cambio de las carpinterías exteriores y de los revestimientos y acabados. También hay que sustituir los sistemas de calefacción y climatización por unos más eficientes energéticamente, para lo que se ha presentado una solicitud al programa de ayudas del Gobierno de España para el impulso de la rehabilitación de edificios públicos. «El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana no ha resuelto todavía la convocatoria», señalan desde la Diputación.
Apuntan asimismo que «actualmente los técnicos provinciales trabajan en la redacción de un anteproyecto con el objetivo de solicitar la licencia» y que estos profesionales no pueden dar fecha aproximada para el cambio «cuando no está redactado el proyecto técnico». En ese sentido, y al ser preguntados por un plazo para que esté listo, responden «están en ello» y que «hay que tener en cuenta que este edificio se adquirió a finales de junio y ha estado el verano por medio».
Procedimiento de urgencia tras un recurso
Según explicó entonces la vicepresidenta del Organismo y de la Diputación, Nuria Illana, la institución provincial decidió hacerse con un nuevo espacio y desechó la opción de comprar al Ayuntamiento de Cuenca el edificio de ICONA -que era la primera opción- debido a que “no podemos seguir esperando sine die una solución». Tras una primera sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Cuenca señalando que la compraventa entre las administraciones se ajustaba a Derecho, Ciudadanos la recurrió al Tribunal Superior de Justicia, lo que a a juicio de la también diputada provincial de Hacienda suponía «paralizar este proceso a toda costa y nos ha obligado a actuar». Argumentó que la acción de la formación naranja iba a prolongar el proceso “otros dos años, según los servicios jurídicos provinciales», dando lugar una situación «improrrogable y absurda».
La compra se tramitó por procedimiento abierto y urgente -lo que implicaba la reducción de los plazos de exposición pública a la mitad- y se presentó una única oferta, la de la empresa Gastro y Talento S.L., que fue finalmente la seleccionada. En el informe de valoración de los criterios de adjudicación cuantificables mediante juicio de valor se destacó la idoneidad del local por su superficie (el mínimo requerido era de 600 metros cuadrados útiles y este suma más de 2.000 en sus tres plantas); su iluminación y ventilación natural; y su ubicación en el centro de la ciudad, a menos de 400 metros del Palacio Provincial y «muy cerca de las estaciones de tren y autobús, facilitando el uso a las personas que vengan del resto de municipios de la provincia».
En el mismo documento también se señalaba su «buen estado de conservación», si bien se apuntaba ya a la necesidad de reformas para su adaptación al nuevo uso -tiene que albergar a 40 trabajadores del Organismo- que son las que ahora está preparando la Diputación.
