Page respalda a Sánchez en el Comité Federal del PSOE: «Sabemos que el compañero presidente va en serio»

Asegura que él también se preguntó cada semana si merecía la pena seguir en política en la época de Cospedal y ha asegurado que los miembros del PSOE se exigen más a sí mismos


El Comité Federal del PSOE de este sábado se ha convertido en un acto de apoyo al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el discurso de Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha y líder de los socialistas en la comunidad, no ha sido una excepción. Al hilo de la carta publicada el miércoles por el inquilino de La Moncloa en la que anunciaba que se daba de plazo hasta el lunes para dimitir o no, Page ha defendido que «los que estamos aquí y los miles y miles de compañeros de toda España, desde luego los miles que están en la calle, sabemos que va en serio el compañero secretario general».

«Sabemos que ha hecho una manifestación de dolor, la ha compartido siendo como es muy difícil», ha dicho Page, quien compartía que había llegado muy indignado al Comité «porque una de las cosas que más me han molestado en estos últimos días es ver como ante una manifestación que es enormemente difícil, ante una manifestación personal de dolor, una cantidad de gente, fundamentalmente los radicales de siempre, hacen burla o piensan que estamos aquí como consecuencia de la violencia. O que esto es una estrategia, o que esto es una treta más. Ese es el concepto que tienen de la política».

A juicio de Page «estas reflexiones son intransferibles» y «lo tenemos que respetar» pero ha abogado por no «solo procesarlo» sino mandar un mensaje «muy claro y nítido a la sociedad española» de que el PSOE «es un partido que cree en la honestidad, de miles y miles de personas de gente honrada a lo largo de su historia más que de centenaria».

Ha recordado que milita en el PSOE «desde los 16-17 años» y que desde esa perspectiva ha visto muchos casos donde «se ataca la honestidad del político» y ha concluido que «cuando a la extrema derecha se les acusa de algo deshonesto, sacan pecho». A su juicio, «siempre hemos tenido en el PSOE la sensación de que nos miden por otro rasero, de que a ellos les exigen de una manera y a nosotros de otra»:

Todo ello le ha llevado a la conclusión de sentirse «muy orgulloso de estar en un partido no al que le exijan más, sino en el que nosotros mismos nos exigimos mucho, mucho más que nadie», Porque, ha insistido, «nos lo exigimos y por ello expresamos dolor».

Por eso, ha vuelto a su tesis inicial, «valora que se duela en la carta» ya que «prefiero sinceramente que nuestros compañeros y nuestros dirigentes se duelan ante una acusación injusta y falsa a que muestren indiferencia o saquen pecho».

«Esa es la actitud que más me conmueve hoy a compartir con los miles y miles de compañeros de nuestra historia. Y con los de hoy, con un objetivo común. Por eso, aunque no soy nadie para dar ningún consejo, sí le quiero transmitir al secretario general, al compañero presidente del gobierno, toda mi empatía».

Ha dicho que «no solo sabemos que va en serio su dolor sino que hemos pasado por experiencias muy parecidas». Ha citado en este sentido agresiones sufridas por militantes en casas del pueblo o «las acusaciones o concejales y concejalas, a todo tipo de cargas».

«Cospedal, la socia de Villarejo»

«Os quiero recordar que, por si alguien no lo recuerda, no quiero con esto establecer ninguna comparación, cada uno se queja de los suyos. Pero a nosotros, en Castilla-La Mancha, nos tocó cuatro años Cospedal, la socia de Villarejo y salíamos a querella por semana». Por eso, ha afirmado, «esa pregunta que se hace Pedro» (¿merece la pena seguir en política) me la hacía en esa época una vez por semana».

Él dice que ha esa respuesta «cada uno puede reaccionar cómo quiera» pero él decidió reaccionar «con la determinación de no dejar una sola calumnia, una sola insidia, una sola mentira sin contestar».

«Y para contestar todas las calumnias y esta campaña vais a contar la dirección y, por supuesto, Pedro, con todo nuestro apoyo, con el mío particularmente, porque no se puede consentir», ha señalado. Ha insistido en que «una querella falsa» no puede tumbar a un presidente del Gobierno, pero que este asunto «no va de eso sino del dolor».

En esa línea argumentativa ha dicho tener claro que hay que decirle a la gente en este país «que no se puede ser mejor político a costa de ser peor persona».

Por eso ha reiterado su apoyo «en este preciso momento, que es absolutamente único y realmente difícil» y ha concluido dejando el siguiente mensaje «A este partido no le van a quitar la moral. Y menos los que no tienen ninguna».