«Autocofinamiento todo lo más que se pueda. Eso es lo más importante». Es el mensaje con el que el consejero de Sanidad, Jesús Fernández, se ha despedido de la rueda de prensa que ha ofrecido este jueves en Toledo -y cuya señal audiovisual ha sido ofrecido en directo- para dar cuenta del decreto de la Presidencia de la Junta por el que se ordena el cierre perimetral de Castilla-La Mancha desde la próxima medianoche.
El dirigente autonómico ha indicado previamente que aunque el límite en las reuniones sociales y familiares se ha bajado de diez a seis personas, su consejo es que «si no son seis y son cero, muchísimo mejor». Ha argumentando que el virus se expande por la movilidad y por la cercanía de las personas por lo que lo mejor para frenarlo será evitar cualquier tipo de encuentro entre no convivientes.
«No hace falta que nos lo diga una norma, tenemos que actuar por responsabilidad propia y cuanto más nos autoconfinemos, mejor será», ha insistido.
Un criterio que también mantiene para la celebración de eventos deportivos. «Lo mejor es que haya el menor número de personas en las gradas», ha señalado recordando que el Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud acordó en su reunión de ayer que las competiciones internacionales de fútbol y baloncesto se celebren en España sin público. No obstante, ha matizado a continuación que entienden «que hay que sobrevivir» y que diferentes sectores busquen mantener su actividad a pesar del virus.
Actualmente en Castilla-La Mancha, con carácter general, se establece que los eventos deportivos que se celebran en espacios cerrados como pabellones no pueden superar los 100 espectadores. Si se realizan en espacios abiertos la cifra se eleva a 750. En aquellas localidades con medidas especiales la norma cambia. En Cuenca, por ejemplo, en las que están vigentes al menos hasta el viernes las limitaciones propias de ciudades de más de 50.000 habitantes no se permiten los encuentros deportivos con público.
