Un estudio de la OCU concluye que la aplicación Radar Covid reúne garantías de privacidad y seguridad

La Organización de Consumidores y Usuarios ha comprobado que la aplicación no recoge datos personales del usuario, y por lo tanto estos permanecen totalmente anónimos.

Un reciente estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) concluye que Radar Covid, la aplicación de rastreo del coronavirus desarrollada por la Secretaría General de la Administración Digital, «reúne las garantías suficientes de seguridad y privacidad».

OCU ha comprobado que la aplicación no recoge datos personales del usuario, y por lo tanto estos permanecen totalmente anónimos. Los únicos permisos de la app son los estrictamente necesarios para un correcto funcionamiento, como es el uso de bluetooth para conectarse a otros teléfonos cercanos o el acceso a internet para comunicarse con el servidor. En cuanto a las comunicaciones, resultan igualmente seguras: conectan solo con un servidor del Gobierno, no incluyen localizadores ni del usuario ni del terminal (tampoco usa GPS) y se transmiten usando protocolos y certificados seguros. Los datos generados por la aplicación se guardan correctamente encriptados en el teléfono. 


OCU espera que estas conclusiones ayuden a disipar las dudas sobre la privacidad y seguridad que existen sobre esta aplicación. De hecho, según una reciente encuesta propia realizada a más de 1.500 personas, dos de cada tres ciudadanos aún no se la habían descargado, bien por dudas sobre su privacidad y utilidad o porque aún no funcionaba en su comunidad autónoma. La app está operativa en el Área de Salud de Cuenca desde el viernes 18 de septiembre y en el resto de la provincia conquense desde esta semana.


«En este sentido y sabiendo que la extensión del uso de la aplicación es la mejor garantía para su utilidad, OCU anima a los consumidores a descargársela», indica la organización consumerista que no obstante también reclama a las administraciones públicas incluir en la aplicación los resultados positivos de los test PCR que realicen los laboratorios privados. Para ello es imprescindible que las autoridades sanitarias faciliten un código específico de infección tal y como se hace con los resultados de los laboratorios públicos. 

Además reclama su extensión a todo el país y conseguir que la app española sea compatible las del resto de países de nuestro entorno.