La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) inició el pasado mes de agosto una excavación arqueológica en Uclés dstinada a los estudiantes del Grado en Historia. El proyecto está codirigido por Cristina Peña Ruiz, conservadora de bienes culturales, y dos profesores de la UCLM, David Gallego y Jesús Molero.
Gallego, director de los trabajos en los que participan 15 personas entre profesores y alumnos, ha expresado su satisfacción por el desarrollo de las tareas y los descubrimientos realizados hasta el momento. «Hasta ahora estamos muy contentos porque han salido unas estancias del siglo XV que teníamos documentadas por la propia Orden y hemos conseguido documentar cuatro estancias. Hemos podido definirlas, hemos localizado varios suelos,…y en alguna de las estancias hemos podido bajar y creo que estamos ya en niveles musulmanes. Para nosotros es muy interesante saber cómo era la alcazaba y hasta dónde llegaba. Por los estudios de las murallas sabíamos que había muros desde el siglo IX hasta el finales del XI y principios del XII pero en excavaciones no se habían sacado nunca. Para nosotros tener toda esa secuencia es muy interesante». En este sentido, destaca que «lo más interesante, quizás, es haber sacado la conexión entre las estancias del siglo XV y las evidencias islámicas de la alcazaba. Cerámica musulmana tenemos bastante pero haber podido conectar el Uclés cristiano con los restos de la alcazaba es fundamental».
El objetivo principal del proyecto consiste en intentar reconstruir la evolución de Uclés desde época islámica hasta que se construye el convento en la época moderna. «Nos interesan, sobre todo, los momentos de transición. Qué pasa cuando se construye la ciudad islámica, cómo se transforma con la llegada de la Orden de Santiago y, a principios de la edad moderna, cuando se vueve a transformar el lugar para construir el monasterio aunque, en realidad, fue un convento», señala el director de la excavación.
Uno de los elementos diferenciadores del proyecto es la utilización de mucha metodología actual. Para ello, se están utilizando vuelos de dron, utilizando laser-scáner, arqueología de la arquitectura,… La excavación arqueológica se desarrolla en el entorno de la torre albarrana de Uclés. Comenzó el día 22 de agosto y continuará hasta este sábado, día 4 de septiembre. «La cultura material que estamos sacando es muy interesante. Nos aparece cerámica bajo-medieval muy abundante, ceramica vidriada, loza,… materiales que vienen tanto de Talavera como de Manises o Paterna…piezas de cierto lujo. Uclés en aquella época rivalizaba con cualquier y tenía posesiones desde la ribera del Tajo hasta Murcia. Es un lugar potentísimo. También han salido collares con piezas de esmalte, fragmentos de cofres, algo de armamento, clavos con la marca de la Orden de Santiago…».
Perspectiva en 3D mediante láser-escáner
Este jueves el proyecto tiene previsto utilizar un láser-escáner para levantar una perspectiva en 3D de todo el cerro, fundamental para poder conocer no sólo el convento y la muralla oeste sino también la muralla hacia el este y saber cómo fue Uclés justo después de la batalla contra los almorávides. David Gallego destaca que se trata de una batalla que cambió todo «porque murió el hijo de Alfonso VI, la monarquía castellana se queda sin herederos, los portugueses se van por su lado…Es un momento clave, además porque de la arqueología almorávide no se conoce apenas nada. Es importante tener el respaldo de la Fundación Fernando Núñez que apoya también el proyecto. la mayor parte de la financiación corre a cargo de las ayudas a la investigación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Y también nos ayuda el Ayuntamiento de Uclés. Nuestra idea es que sea un referente todos los años para formar a los alumnos de la UCLM».
A partir de ahí continúa la campaña hasta el 31 de octubre con el resto de trabajos que integran el proyecto. «También estamos pasando ahora un geo-radar en el claustro del monasterio para ver si se conservan restos del edificio medieval bajo el claustro. Ahora hemos tenido que parar las prospecciones arqueológicas porque no se puede pisar el campo por el girasol y lo hemos tenido que posponer para finales de septiembre, a partir de San Miguel. Seguiremos a partir de entonces porque nos interesa mucho reconstruir el Uclés islámico. El cristiano lo conocemos muy bien. Pero ahora se trata de un proyecto de investigación total y podemos intervenir con toda la metodología que tenemos».
El director de la excavación ha puesto de relieve que «empezar a sacar los vestigios de la alcazaba es muy importante y, sobre todo, es interesante tener la conexión entre la alcazaba y la época cristiana. A nosotros nos interesan los momentos de transición que, a veces, son los más difíciles de ver pero son fundamentales. Si no, no sabemos la evolución. Sabemos que la alcazaba era muy grande pero también se trata de desmontar mitos porque, por ejemplo, la muralla este de Uclés se llama la muralla árabe aunque la levanta la Orden de Santiago».
