Los trabajadores de MAHLE en Motilla decidirán este miércoles sin van a la huelga

Para este jueves se ha concentrado una nueva concentración contra el ERE planteado por la multinacional alemana

La plantilla de Mahle afronta nuevas movilizaciones para oponerse al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado para las factorías de Motilla y Paterna. Los trabajadores de la planta motillana votarán este miércoles, 15 de octubre, si elevan el nivel de sus acciones hasta la convocatoria de huelga. Se decidirá en una asamblea, en los distintos turnos, donde también se abordarían las posibles fechas del paro.

Paralelamente se ha registrado ante la Subdelegación del Gobierno en Cuenca la convocatoria de concentración para el jueves 16 de octubre. La fecha coincide con la llegada a Motilla del Palancar de los miembros del comité de empresa europeo de Mahle, representantes del consejo de vigilancia de la multinacional que velan por el cumplimiento de las condiciones de trabajo allí donde ésta tiene presencia. «Su viaje es a requerimiento de los compañeros y compañeras de Motilla que, ante la deriva de la empresa y su anuncio de ERE, quieren recabar el apoyo de sus homólogos europeos», han señalado desde el sindicato CCOO.

Mientras tanto se siguen sucediendo las reuniones semanales, en Motilla y Paterna, con la dirección de la empresa que, en su cita de ayer, entregó nueva documentación que el comité ha considerado insuficiente y que está siendo analizada minuciosamente por los servicios jurídicos del sindicato.

CCOO ha trasladado a la empresa, durante las negociaciones, el rechazo unánime y rotundo ante este ERE, el mayor en la historia de la provincia de Cuenca, que argumenta en causas organizativas y productivas. «Venimos exigiendo que reconsidere y cambie de postura o, de lo contrario, busque soluciones para los trabajadores y trabajadoras de la planta así como para la economía de la comarca de La Manchuela», señalan.  

El sindicato apela a las administraciones públicas para que fuercen a la multinacional a buscar  alternativas menos traumáticas y que exploren otras vías, como la atracción de nuevos proyectos empresariales en la zona, con las acciones de formación y capacitación correspondientes.

Señalan que «el único objetivo debe ser salvar el empleo y reducir al máximo el impacto laboral y económico del ERE y lo defenderemos en las mesas de negociación y en la calle».» porque «no vamos a aceptar que más de medio millar de familias se queden sin sustento ni que se ponga en riesgo la viabilidad de la factoría».