“La Diputación de Cuenca tiene cero euros de deuda y tenemos la tesorería como nunca”

Entrevista del domingo con Álvaro Martínez Chana, presidente de la Diputación Provincial de Cuenca

Con el comienzo del nuevo curso político como telón de fondo, el presidente de la Diputación Provincial de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, recibió a Voces de Cuenca para charlar largo y tendido sobre los asuntos y proyectos más destacados que atañen a la provincia de Cuenca, tanto si son competencia de la institución de la calle Aguirre 1 como de otras administraciones de índole nacional, regional y local. Chana mantiene en lo alto la ilusión de que hacía gala en la última entrevista concedida a este medio y afirma rotundamente que la provincia de Cuenca “ha dado un giro que va a traer muy buenas noticias en los próximos años”

Después del verano, que es un periodo en el que se habla menos de ello, comenzamos un nuevo curso político. ¿Qué balance hace de lo que llevamos de legislatura?

Lo cierto es que para nosotros no existe un antes y un después entre las dos legislaturas, ya que el proyecto continúa y el balance no es tanto de este año y medio sino de todo lo que llevamos al frente de la institución. Bien es cierto que en los últimos años nos hemos lanzado de forma decidida en lo que se refiere a la industrialización, en esa apuesta porque nuestra provincia pueda tener una oportunidad en lo que a industria se refiere. Estamos satisfechos en este camino iniciado, dando pasos firmes en zonas como Motilla, Tarancón o la propia capital y también estamos expectantes en el sentido que lo que sembramos de otros proyectos en la pasada legislatura está ya muy cerca de ponerse en funcionamiento, como pueden ser los parques de bomberos o el parque científico y tecnológico. No hemos parado, ni siquiera en verano, y estamos en balance continuo.

Me imagino que su mayoría absoluta les da una tranquilidad importante a la hora de abordar proyectos a medio y largo plazo.

Obviamente, en una época en la que las mayorías absolutas no son nada comunes, nosotros contamos con el respaldo mayoritario de los ciudadanos de la provincia de Cuenca, tanto a nivel provincial como regional. Eso es un indicador de que la gente aprueba lo que se estaba realizando, pero también supone una carga de responsabilidad y saber que uno no se puede dormir, que hay que continuar con los proyectos y ampliar aquellas cuestiones que se requieran. Yo, que llevo años en política municipal, sé que una legislatura es muy poco para poder desarrollar ciertos proyectos, porque la burocracia obliga a procesos muy lentos y desarrollar cualquier iniciativa suele trascender de la legislatura. Por eso, contar con este segundo mandato es muy importante para nosotros y poder culminar los proyectos que iniciamos en el pasado y otros nuevos que también van a trascender de éste, como pueden ser el proceso de industrialización o poner en marcha el servicio de gestión centralizada del agua, que confío en que tengan continuidad en futuras legislaturas porque son temas clave para nuestra provincia.

¿Qué pasos se han dado en lo que se refiere al plan de industrialización y qué pasos se van a dar en el futuro inmediato?

Concretamente, en el ámbito de la ordenación territorial y la creación de suelo industrial, en Motilla ya estamos trabajando de la mano de una empresa para diseñar un plan de singular interés para esa zona que tiene una superficie cercana al millón de metros cuadrados. En Tarancón vamos a contratar en los próximos días a otra empresa para la elaboración de la documentación que nos sirva para ver qué cuestiones pueden tener de dificultad otros terrenos desde el punto de vista medioambiental o de servicios. Hemos hablado también con el alcalde de San Clemente, que tiene ya delimitada una zona destinada a suelo industrial, y aquí en Cuenca está el propio parque científico y tecnológico, que sigue la dinámica burocrática en sus estadios finales, así como las necesidades que pueda tener Sumitomo. En lo que a energía se refiere estamos revisando el convenio de la subestación de Motilla, que va a servir para dotar a esa zona industrial que vamos a crear así como las que ya hay, especialmente a Mahle, y en Montablo estamos pendientes de esa remisión del convenio que nos permita dar una empuje al suministro de electricidad, que es una pata imprescindible para cualquier proceso de industrialización. Y habrá otros municipios de la provincia donde puedan existir oportunidades e iniciativas de este tipo, como Huete, Quintanar del Rey o Iniesta. No vamos a parar ni un segundo para conseguir que ni una sola empresa que quiera instalarse en nuestra provincia deje de hacerlo por falta de suelo o servicios.

Ya se ha referido a ello, pero hay dos suministros clave, la electricidad y el agua. ¿La provincia de Cuenca tiene asegurados esos suministros para poder ir al ritmo de la industrialización que se pretende?

Obviamente hay problemas, si no no estaríamos planteando la ampliación de una subestación y la creación de otra en Motilla y Montalbo. El caso de la energía es paradójico, puesto que somos una provincia en la que se genera mucha energía limpia y en la que durante mucho tiempo hemos visto cómo la falta de suministro era un hándicap para que se pudieran instalar empresas. Nosotros hemos querido de una forma urgente anticiparnos, pero me consta que el gobierno regional está sentando las bases con el Ministerio de Transición Ecológica para que nuestras zonas en cuestión de energía no sean sólo trasvasistas, sino que una parte de lo que aquí se genere pueda servir para el desarrollo de nuestra industria. En materia de agua tenemos dos cuencas en las que no hay un problema de abastecimiento, Júcar y Tajo, pero sí que tenemos problemas en la del Guadiana, en la que el volumen de agua para el uso industrial es muy bajo y se está trabajando para que esto pueda mejorarse, aprovechando esa magnífica infraestructura que es la llanura manchega, donde se van a liberar 50 hectómetros cúbicos del subsuelo, y estamos pidiendo que una parte de esos 50 hectómetros cúbicos se pueda quedar como reserva estratégica para proyectos de nuestra provincia.

“No vamos a parar ni un segundo para conseguir que ni una sola empresa que quiera instalarse en nuestra provincia deje de hacerlo por falta de suelo o servicios”

Sobre la situación económica de la Diputación la oposición ha sacado una nota en la que se alerta de un supuesto déficit de 21 millones de euros en la institución. ¿Qué tiene que contestar a esto?

Les contestamos en el pleno, pero para quienes no están habituados a cómo funcionan algunas cuestiones presupuestarias lo vuelvo a hacer. Indicar que estamos hablando de una desviación presupuestaria entre los derechos reconocidos y las obligaciones que se cubre con nuestro remanente de tesorería, que viene motivada porque el 2023 fue un año de una actividad inversora nunca antes vista en nuestra provincia, y viene posibilitado porque en el año 2022 obtuvimos un superávit de más de 20 millones de euros y en el que los derechos reconocidos compensaron sobradamente las obligaciones y luego fueron invertidos al año siguiente en unas cifras inusualmente altas, incluso con un resultado favorable de más de 3 millones de euros. Estamos pasando un periodo desde 2020 en el que las reglas fiscales fueron encapsuladas por la Comisión Europea debido a la coyuntura internacional motivada por la pandemia y los distintos conflictos bélicos internacionales, lo que posibilitó que hubiera una expansión en los presupuestos y la inversión. Este año las reglas fiscales han vuelto y somos conscientes de que tenemos que cumplir tanto en estabilidad presupuestaria como en la regla de gasto, siempre teniendo claro que no queremos abandonar la senda inversora. En definitiva, para tranquilizar a quienes se puedan enredar con los números de un presupuesto afirmo que la Diputación de Cuenca tiene cero euros de deuda, somos la institución que más rápido paga de todo el país y tenemos la tesorería como nunca, posibilitado por las transferencias del Gobierno de España, que ha incrementado nuestros presupuestos de algo más de 70 millones a más de 117 millones. 

¿Cómo se ha comportado el turismo en lo que va de año y qué perspectivas hay para un trimestre tan importante como el que acabamos de iniciar?

Está siendo un año muy bueno, y los datos del INE así lo avalan. Hemos incrementado un 3% los viajeros en el mes de agosto y esos datos también señalan que en el mes de julio Cuenca es la provincia de interior que más ha crecido entre 2019 y 2024 en pernoctaciones y viajeros, teniendo en cuenta que los datos estivales no suelen ser buenos, pero que este año ha sido incluso esta época ha sido muy buena. Ahora llega una época fundamental para nosotros y para todo el turismo de interior en el que esperamos que esos datos se confirmen. Estamos por tanto satisfechos, pero no conformes porque somos ambiciosos, queremos más y no en vano estamos poniendo en práctica políticas que están llamadas a apuntalar uno de los sectores básicos de nuestra economía como es el turismo. 

¿Qué avances hay en el proyecto de Toro Verde?

Nuestra intención es firmar un convenio con la empresa para desarrollar proyectos conjuntos en la capital, en la comarca y, me atrevo a decir, en toda la provincia. Este proyecto es fundamental y nos consta que están realizando un gran trabajo en estas fases previas a la puesta en marcha del parque y los plazos que se han marcado creo que son bastante realistas y estamos ilusionados en que se cumplan. Siempre digo que estas fases son de puertas para adentro, pero el proyecto está llamado a ser una revolución para nuestra provincia y en Diputación lo vamos a apoyar decididamente.

¿Y sobre el parque tecnológico y científico qué novedades nos puede adelantar?

Siempre hemos dicho que el ser pioneros en realizar el primer plan de singular interés de la región supone que todos estamos aprendiendo, incluyendo a los técnicos de la propia Junta de Comunidades. Nunca se había dado un caso como este y eso tiene ventajas e inconvenientes. Se han aprobado todos los proyectos de urbanización, estamos en la fase medioambiental donde el periodo de alegaciones terminará ya y una vez que esté todo reunido estoy esperanzado con que antes de final de año podamos tener el visto bueno, lo que posibilitará poder ponernos a licitar la urbanización de esos terrenos. Desde un punto de vista político a uno le resulta algo frustrante ver cómo se eternizan los papeleos, pero estamos viendo la luz al final del túnel y estamos esperanzados con el que el año que viene sea definitivo el alzamiento de la obra de un parque que va a ayudar a nuestra ciudad a un salto industrial como no tenía desde hace mucho tiempo.

Otros proyectos que vienen del mandato anterior son los de los parques de bomberos. ¿En qué situación se encuentran?

Actualmente estamos dotando y recientemente publicábamos la adquisición de dos motobombas rurales, la licitación de más vehículos en ellos y en las próximas semanas vamos a licitar la parte de mobiliario. El año que viene lanzaremos el diseño del operativo en lo que a personal se refiere y la influencia que ello tiene en los convenios que mantenemos con el Ayuntamiento de Cuenca o con lo que se desarrolla en Motilla y Tarancón, puesto que habrá de redefinir zonas y ver cómo funciona ese operativo. Confiamos, aunque será un proceso largo porque va a entrar mucho personal en la casa, en que en 2026 podamos tener ya plenamente operativos los dos parques de bomberos.

“Confiamos, aunque será un proceso largo porque va a entrar mucho personal en la casa, en que en 2026 podamos tener ya plenamente operativos los dos parques de bomberos”

Álvaro Martínez Chana. Fotos: Esteban de Dios

Desde hace un tiempo se están acometiendo las obras de acondicionamiento de lo que será la nueva sede del Organismo Autónomo de Gestión Tributaria. ¿Hay fecha prevista para el traslado a esa nueva sede?

Las obras van a finalizarse sino a lo largo de este mes en el de noviembre, porque van muy avanzadas. Esperamos que en el primer trimestre del nuevo año podamos dar por finalizado el traslado del Organismo Autónomo a la nueva sede de Diego Jiménez.

¿Sigue interesada Diputación en el antiguo edifico de ICONA?

Es una lástima ver cómo por un ejercicio de mala política dos millones de euros que estaban pactados entre Ayuntamiento y Diputación, porque esta Diputación sí mira por la capital y apuesta por ella, se perdieran, pero sí que nos hemos emplazado el alcalde de Cuenca y yo mismo a una reunión para ver el futuro de este edificio y si se da la oportunidad poder volver a retomarlo, siempre con una visión positiva, porque en un pasado no tan lejano la Diputación vivía de espaldas a la ciudad de Cuenca y ahora es todo lo contrario.

¿Hay alguna novedad sobre el Plan X Cuenca?

Sí, esta semana hemos conocido que el día 11 de este mes acaba el plazo para que las partes presenten la documentación y las alegaciones, tanto los que instaron la parada como los que estamos por la labor de que se relance el proyecto. A partir de ahí será la sala del Tribunal Supremo que está viendo este asunto la que tome la determinación de si el plan puede seguir adelante o definitivamente quede enterrado. Yo confío en que sea lo primero, porque esto es un ejemplo de cómo estas decisiones están perjudicando notablemente a la ciudadanía. A mí me deja perplejo ver cómo dirigentes del PP y de otras fuerzas políticas se hacen fotos en los terrenos de ADIF reclamando la limpieza y el acondicionamiento de esos terrenos cuando es culpa suya que estén así. Podría haber 400 plazas de parking y a disposición de los y las conquenses, podríamos estar hablando ya de la licitación de una zona deportiva en esa área, podríamos hablar de un inicio del proyecto de la conexión entre la estación del AVE y el centro de la capital, con 20 millones que pondría el Gobierno de España, y sin embargo estamos como estamos. Por tanto, yo les digo a todos aquellos que reclaman que se lo hagan mirar, porque la culpa de todo tiene su nombre.

Me gustaría preguntarle por las ayudas al funcionamiento, que además fueron objeto de polémica por parte de algunos políticos que desconocen lo que son y las comparaban con determinadas políticas de financiación que no tienen nada que ver. ¿Cuáles son las demandas de Diputación en este terreno?

Quiero pensar que el desconocimiento llevó a algunos dirigentes de mi propio partido a confundir lo que es una ayuda con un sistema de financiación, porque nada tienen que ver ni en cantidad ni en la filosofía de los programas. Ciertamente nosotros queremos más, y así lo hemos transmitido a los responsables políticos del país, para que estas ayudas se incrementen hasta el máximo que permite la UE, que es el 20% de los costes laborales. Somos ambiciosos y estamos alineados con las confederaciones empresariales, pero también hay que ser realistas y ser conscientes de que estas ayudas no existían hace unos años y que han permitido el ahorro de costes por un importe superior a 22 millones de euros en menos de dos años. Ahora tenemos estas ayudas y es momento de reclamar que se aumenten, pero 22 millones de euros es una cifra importante para un tejido empresarial que no es como el de otros territorios.

¿Cree que desde la sociedad que vive en grandes núcleos de población como desde la alta política nacional se dimensiona correctamente el problema de la despoblación?

Hemos conseguido una primera victoria muy importante que es colocar la despoblación en la agenda política, que no estaba, a pesar de que en el periodo 2011-2019, gobernando el PP en España, el problema se agudizó de forma alarmante y la caída de población fue para haber tomado medidas drásticas que no se tomaron. A los que sufrimos la despoblación nos gustaría que esto fuera más rápido y que hubiera más medidas contra ella, pero dicho esto en ninguna otra época ha habido un Gobierno de España más sensible que el que tenemos ahora mismo con este tema, con líneas de ayuda para zonas rurales como nunca se había hecho y el hecho de haber ganado población últimamente nos da esperanzas de seguir mejorando. Se han dado pasos importantes y creo que vamos en la buena dirección.

Aunque no es competencia de la Diputación me imagino que habrá recibido con alegría la noticia de la inauguración del nuevo hospital de Cuenca, porque va a dar servicio a toda la provincia.

Esto responde al compromiso del gobierno regional de equipararnos en oportunidades con zonas urbanas más pobladas que nuestra provincia. Es un hospital del siglo XXI, que reúne todas las condiciones para atender a todos los ciudadanos que lo necesiten y que es motivo de satisfacción que los buenos profesionales que tenemos en la provincia puedan desarrollar su trabajo en un lugar moderno y con medios de primera. Creo que va a ser un día muy importante, que debía haber llegado antes porque no se debía haber parado y estar abierto desde hace años, y el día 19 de diciembre toca inaugurarlo. 

“Para una provincia que puede verse afectada, no es una buena noticia el hecho de que se pueda romper la caja única y que pueda haber una financiación singularizada para un territorio”

¿Le consta si en la entrevista de Emiliano García-Page se han planteado infraestructuras que afectan a la provincia de Cuenca?

No he hablado con el presidente regional en estos últimos días, pero sí que en estos meses pasados, cuando hemos tenido oportunidad de hablar de infraestructuras, siempre salen a colación las autovías a Albacete, Teruel o Guadalajara, y se ha hablado de ellas. La voluntad del gobierno regional es que se vuelvan a retomar proyectos que tampoco deberían haberse parado nunca y que supusieron indemnizaciones millonarias a distintas empresas. Yo espero que pronto se retome especialmente la autovía Cuenca-Albacete, que es vital para la ciudad puesto que es una salida natural al Levante y además el volumen de tráfico que tiene esa carretera es significativo. Confío en que en esa negociación se puedan desatascar todos los entuertos que pueda haber y continuar con estos proyectos.

También comentó el presidente regional que le iba a plantear el tema de la financiación, que es una de las cuestiones que más le separan de Sánchez. ¿Usted, como presidente de una diputación de una provincia extensa y despoblada qué pide en materia de financiación?

No demando otra cosa que se cumpla la Constitución. Estamos en un país vertebrado donde los que más tienen más aportan y los que más necesitan más deben recibir. Ese es un principio que ha regido durante los últimos años y que ese acuerdo, que no conocemos, amenaza con romper. Por tanto, para una provincia que puede verse afectada, no es una buena noticia el hecho de que se pueda romper la caja única y que pueda haber una financiación singularizada para un territorio. Lo ha expresado muy bien el presidente Page, la singularidad de la educación, la sanidad y de los servicios sociales es igual en Tarragona, en Burgos, en Alconchel de la Estrella y en cualquier otro sitio, y ese es el principio que debe regir y que siempre ha regido en el PSOE, el de la igualdad de oportunidades y la redistribución de la riqueza, el equilibrio entre las zonas que más tienen y las que tradicionalmente hemos estado más atrasadas. Yo confío en que de ese debate sano pueda salir una corrección y que se diseñe un sistema de financiación en el que tenga peso la población pero también dos aspectos fundamentales, la dispersión de los servicios, con el coste adicional que conlleva, y otro que siempre se le olvida al PP, que es el del esfuerzo y la carga fiscal. Para los ayuntamientos el sistema de los tributos del Estado viene posibilitado por el esfuerzo fiscal y la carga fiscal, de tal forma que el que más esfuerzo fiscal hace más recibe. Si yo hago un símil con las comunidades autónomas, habría que ver si las que se dedican a reducir su esfuerzo fiscal no deberían verse afectadas en lo que a financiación se refiere, porque pedir por un lado y quitar por el otro es bastante injusto.

Termino recordando una entrevista que le hice en enero y en la que me decía que al 2024 le pedía que se mantuviera la ilusión que se había generado en los años anteriores. ¿Percibe, a punto de empezar el último trimestre del año, que esa ilusión se mantiene?

Sí, sí, por lo menos yo la tengo y creo que la gente también. Esta provincia ha dado un giro y es un cambio que va a ir lentamente, porque no puede ser de otra manera, pero no hay retorno y este cambio va a traer muy buenas noticias en los próximos años, no me cabe duda.