“Estos presupuestos ratifican la línea inversora y son una gran oportunidad para la provincia de Cuenca”

Entrevista a Álvaro Martínez Chana, presidente de la Diputación Provincial

Son días de mucho ruido político, tanto a nivel local como provincial, y en este entorno se agradece escuchar voces calmadas, alejadas de la crispación, como la de Álvaro Martínez Chana, presidente de la Diputación de Cuenca. La institución provincial afronta un nuevo año con el presupuesto de mayor cuantía de su historia pero también en el ojo del huracán político por la polémica suscitada por el plan XCuenca, que supone el cese del servicio del tren convencional. Chana aborda estas y otras cuestiones de actualidad referidas a nuestra provincia en esta amplia entrevista que reproducimos a continuación.

– Lo primero por lo que me gustaría preguntarle es por los recién estrenados presupuestos de la Diputación Provincial, que marcan un hito en cuanto a su cuantía superando los 100 millones de euros.

Efectivamente, 100 millones de euros y también la agilidad con la que los hemos elaborado, lo que nos permitió que el día 3 de enero estuvieran ya en ejecución y al servicio de nuestros ayuntamientos y ciudadanos. Más de 100 millones de euros posibilitados también por la cesión de tributos del gobierno central, que en una apuesta por el municipalismo van a ratificar la línea inversora que llevábamos estos dos últimos años y en la que queremos incidir de nuevo. Hay que decir que además no recogen todas las posibilidades que los fondos europeos nos van a poner encima de la mesa, que van a ser muchas. Creo que estamos en un periodo de expansión que pude significar una oportunidad importantísima para la provincia de Cuenca.

– ¿Cuáles son los capítulos que usted más destacaría de estos presupuestos?

Los capítulos 6 y 7 son los más importantes en cuanto inversión se refiere, con esos 8 millones de euros que recogemos para actuaciones en economía verde; apostamos también por nuestras infraestructuras, con casi 2 millones de euros en carreteras y otros tantos en caminos, y también en patrimonio reflejamos 1 millón de euros que cuando haya remanentes ampliaremos. En línea de continuidad están las inversiones en planes de obras y servicios o parque de bomberos junto con nuevas líneas como pueden ser las new working que se plasmarán en centros de teletrabajo en distintas zonas de la provincia.

– En total casi 30 millones de inversión. Casi un tercio del presupuesto, algo que no suele ser habitual en una administración.

No suele ser habitual, no. Es verdad que deuda no existe y que nuestro gasto en el capítulo de personal está muy bien estructurado, supera el 20% pero estamos lejos de lo que otras diputaciones gastan en ello, y todo esto nos permite que podamos incidir en el aspecto inversor, que es el que genera servicios, empresas, riqueza y por el que tenemos que apostar decididamente.

“Esto nos permite que podamos incidir en el aspecto inversor, que es el que genera servicios, empresas, riqueza y por el que tenemos que apostar decididamente”

– ¿En lo que respecta a los proyectos en los que se lleva trabajando desde el comienzo de su mandato qué novedades nos puede aportar?

En cuanto a la planta de residuos se está ultimando el anteproyecto por parte de Geacam y con toda probabilidad en este mes de febrero lo podamos presentar e iniciar el trámite medioambiental y en paralelo los trámites de los pliegos para la licitación de la obra. Estamos hablando de una inversión de casi 30 millones de euros para el que ya estamos hablando con la Junta de Comunidades para buscar financiación a través seguramente de los fondos FEDER.

Sobre el Parque Científico y Tecnológico la parte burocrática se está ultimando y hay un presupuesto comprometido de 3,5 millones de euros para iniciar el centro de investigación en algo tan importante como es el hidrógeno. Tuvimos recientemente una reunión con gente del Centro Nacional del Hidrógeno y con la UCLM para estar preparados para iniciar las obras. Que Cuenca vaya a tener un centro de este tipo es algo muy importante.

En los parques de bomberos estamos trabajando de forma constante, en Cañete va a muy buen ritmo y en Priego quizá vamos un poco más lento debido a las circunstancias que rodean a las constructoras pero vamos a intentar que salga adelante cuanto antes. Y por otro lado estamos mirando también las inversiones en materia de carreteras y caminos que debido a los problemas meteorológicos van a hacer que en la provincia se realicen las inversiones más importantes de las dos últimas décadas.

– Me hablaba de esas inversiones como motor del desarrollo de la provincia que lleva aparejado la fijación de la población. 

Obviamente hay condiciones necesarias, aunque no totalmente suficientes, para combatir la despoblación. De todas formas me gustaría recalcar algo importante como es que la pérdida de población se ha atenuado en los últimos años. Gran parte de la pérdida de población de los últimos 10 años se produce desde 2012 a 2016, a partir de entonces se ralentiza. Esto no significa que esté solucionado el problema pero es importante que la curva se atenúe y con los datos en la mano vemos que los años más duros son los que he dicho, pero ahora estamos estabilizados y lo que tenemos que hacer es generar estructuras e inversiones como las hospederías de Uña y Huete o la puesta en funcionamiento de proyectos como las escuelas de pastores o tractoristas, que son nichos de empleo que están ahí y de los que hasta ahora nadie se había preocupado. Son muchas las piezas que hay que encajar pero considero que estamos en un punto de inflexión que puede redundar para que en la próxima década las cifras de población vuelvan a subir a niveles de hace un tiempo.

– Hace unos días Enrique Martínez Pomar, fundador del Proyecto Arraigo, me decía que él ve que está habiendo un cambio en el paradigma de lo que se considera calidad de vida y que la gente está mirando de nuevo al medio rural como lugar de residencia, lo que augura un aumento de la población en él.

Precisamente con Arraigo estamos trabajando en un proyecto que se ha iniciado recientemente y que estoy convencido que va a crecer y al que se van a adherir más ayuntamientos. Comparto totalmente la visión de Enrique, en nuestros pueblos cada vez hay mejores servicios, con la movilidad existente el empleo está dejando de ser un problema y estoy convencido de que las bondades de vivir en un pueblo van a hacer que mucha gente se replantee abandonar la ciudad. No es algo fácil, algo que no vamos a sacar adelante en dos días, pero sí creo que ese cambio de tendencia está en la sociedad y lo que tenemos que hacer es ayudar a que se convierta en una realidad.

“Estamos en un punto de inflexión que puede redundar para que en la próxima década las cifras de población vuelvan a subir”

– Le quería preguntar también por el concurso Integra 4.0 con ayudas a nuevas empresas y que tiene unos premios con una cuantía realmente importante.

Estamos hablando de que el primer premio es de 100.000 euros, que para iniciar una actividad es una cifra muy considerable. Es una apuesta muy decidida por proyectos incipientes y además en nichos productivos de futuro como proyectos de economía circular, de energías renovables, de digitalización a los que se van a dedicar muchos fondos europeos y que pueden ser un revulsivo productivo. No había existido nunca en esta casa una apuesta tan firme por los emprendedores que quieren iniciar una nueva actividad.

– Otra pata importantísima de la mesa de la economía provincial es el turismo enfocado hacia el patrimonio. Recientemente en Fitur se presentaba un proyecto para llevar cultura y artes escénicas a recursos patrimoniales importantes tal y como se hizo el año pasado en Segóbriga. ¿Es su intención dar un paso más en la utilización de esos recursos patrimoniales de nuestra provincia?

Lo estático no evoluciona. Siempre hemos repetido que el patrimonio debe trabajar para la sociedad porque puede generar un círculo virtuoso que haga que podamos reinvertir aquello que generemos con el patrimonio en el mismo patrimonio. Se trata de poner en valor lo que hemos conservado y que nos sirva para mirar al futuro. Hay que hacerlo siempre respetando los criterios que los expertos establecen pero yo creo que esta es la línea correcta porque al final va a servir para mejorar nuestros activos patrimoniales. Vamos a llevar arte y cultura al patrimonio de todas las comarcas de la provincia y por sus principales elementos en una inversión de 300.000 euros que tampoco se ha realizado nunca en esa cuantía. Además ayudamos a nuestro sector cultural tan golpeado en estos dos últimos años para desarrollar su actividad en unos lugares únicos y por otro lado estamos ofreciendo a nuestros vecinos del medio rural la oportunidad de que tenga una oferta cultural de primer orden.

“El proyecto XCuenca supone potenciar el tren de alta velocidad y la movilidad en las zonas rurales y cuando empiece a funcionar la gente va a saber apreciar las ventajas que supone para Cuenca”

– Me ha hablado de movilidad y de estatismo, dos términos que si los unimos lo primero que me viene a la cabeza es toda la polémica que se ha organizado con la cuestión del cese de servicio del tren convencional. ¿Esperaba todo este ruido que se ha organizado alrededor del proyecto XCuenca?

Sí, sí, era de prever que no iba dejar indiferente a mucha gente. Cuando se hablar de un cambio radical, de una apuesta tan importante como la que se plantea en el proyecto XCuenca, sea por intereses partidistas, por la propia nostalgia de un servicio que llevaba más de 70 años entre nosotros o por otras causas, éramos conscientes de que iba a tener la repercusión que está teniendo. Este es un proyecto, y siempre lo he dicho, que nace con la intención de mejorar lo que tenemos. Mucha gente habla de que nos van a quitar algo pero no hablan de lo que nos van a poner, y si uno pone en un lado de la balanza lo que se va a eliminar y en el otro lo que se va a poner al servicio de los ciudadanos no hay color. Y eso sólo desde un punto de vista cuantitativo, ya no hablo ni siquiera de lo cualitativo. Además hago una reflexión: si esto uno lo plantea a un ciudadano de una ciudad del tipo de Cuenca, capital de provincia, te van a decir que hay que aprovecharlo, y a mí me lo han dicho habitantes de otras ciudades a los que les sorprende la reacción contraria a este proyecto. Es cierto que muchos vienen de ciudades donde no hay AVE, porque en España hay 23 capitales de provincia que no tienen AVE. No sabemos realmente lo que tenemos en esta ciudad y en esta provincia y el proyecto XCuenca supone potenciar el tren de alta velocidad y la movilidad en las zonas rurales. Hace unos días visité la Alcarria y pregunté los datos de usuarios del tren de Huete a Cuenca y el año pasado no subía ni un viajero por tren y sentido. Esto habla de cómo está funcionando el servicio y creo que tenemos una oportunidad que, sinceramente, sé que tiene riesgos políticos, pero es que nosotros no estamos pensando en las próximas elecciones, estamos pensando en una oportunidad a medio y largo plazo para esta ciudad y esta provincia. Estoy convencido que cuando el proyecto empiece a funcionar, cuando se vean las mejoras urbanas en Cuenca o Tarancón, cuando empecemos a trabajar la gente va a ver los beneficios que tiene este proyecto para nuestra provincia y va a saber apreciar las ventajas que supone para Cuenca.

– ¿Tiene la percepción de que se les está señalando como culpables de una decisión que al final corresponde al Ministerio?

Obviamente la decisión de cerrar el servicio es del Ministerio pero es que esto es algo que antes o después iba a llegar y al final nos íbamos a encontrar con una línea sin uso. El Ministerio aquí plantea una alternativa porque ve una oportunidad para que líneas ineficientes se puedan reconvertir y volver a ser eficientes aprovechando las líneas de alta velocidad y aprovechando otras formas de movilidad con autobuses de distintas plazas que respondan a la demanda de los núcleos de población más pequeños. Al final el Ministerio plantea y las administraciones que no tenemos competencias en materia ferroviaria hemos decidido apoyar ese proyecto porque es lo mejor para la provincia y la ciudad de Cuenca.

– Otra infraestructura que tampoco es competencia de la Diputación pero que sería importantísima para la provincia de Cuenca es la autovía Cuenca-Albacete. ¿Qué noticias tiene usted sobre el estado de este proyecto?

Hay que poner nombre y apellidos a porqué no está esta autovía. Los estudios y las adjudicaciones estaban ya y el primer gobierno del PP que hubo en Castilla-La Mancha dio marcha atrás, hay que decirlo. Se trata de una infraestructura fundamental donde el gobierno regional tiene la voluntad, porque aquí también hay un acuerdo con el gobierno de España para la construcción de otra autovía, y se han iniciado nuevamente los estudios para que se el proyecto se pueda poner en marcha de nuevo cuanto antes. Cierto es también que estamos en unos tiempos en los que estas inversiones en grandes infraestructuras no son tan comunes como hace unas décadas pero yo confío, y desde Diputación estamos empujando para ello, en que esta autovía sea cuanto antes una realidad y Cuenca tenga esa salida hacia Levante y Albacete que tan bien le vendría.

– No me gustaría dejar pasar la ocasión de preguntarle, como alcalde de un pequeño pueblo agrícola y ganadero y presidente de la Diputación de Cuenca, por las declaraciones del ministro Alberto Garzón sobre la calidad de la carne española. 

Creo que fueron cuando menos desafortunadas y, lo dije en el pleno del miércoles, creo que las realizó desde el desconocimiento. Aquí habría dos debates, uno es el de la calidad de la carne española y el cumplimiento de la normativa en las ganaderías extensiva e intensiva, que está fuera de toda duda y donde se hace un flaco favor a los ganaderos con declaraciones como las del ministro, y otro es lo que a cada uno le guste más, la ganadería extensiva o intensiva, esto es como al que le gusta más un tomate de huerta u otro de gran superficie, los dos cumplen los estándares de calidad y a unos les gustará uno y a otros otro, pero lo que no cabe duda es que nuestro sector cárnico no sólo cumple sino que le da un potencial tremendo a la provincia de Cuenca sobre todo en empleo.

Dicho esto lo dicho por Garzón es una declaración de un ministro del gobierno de España y lo importante es lo que se plasma en el BOE y el apoyo que el gobierno de la nación a todo el sector agroalimentario.

– ¿Qué opina del movimiento de la España Vaciada y del futuro que puede tener esta opción en nuestra provincia?

En primer lugar respeto que algunos ciudadanos decidan constituirse en plataforma, partido o la forma asociativa que deseen para luchar por lo que ellos creen. Respetando esto tengo que decir que en Castilla-La Mancha no tienen cabida en el sentido de que somos una región pionera en la lucha contra la despoblación y en muchos sitios miran con envidia a esta región porque les gustaría tener una ley contra la despoblación como la que tenemos en Castilla-La Mancha con la estrategia de garantizar servicios, ayudando financieramente para que haya una diferenciación fiscal o garantizando la movilidad. Cada uno puede elegir la opción que quiera pero sí me gustaría remarcar que dentro de este mare magnum que está surgiendo de asociaciones existe también mucha gente que desde lo urbano intenta subirse al caballo de lo rural, y uno que vive en el pueblo dice que lo primero que hay que hacer es escucharnos a los que vivimos en ese medio para saber de qué se hablar porque subirse a la moda de reivindicar pero haciéndolo en muchos casos desde el desconocimiento de la realidad de los pueblos para mí es totalmente contraproducente.