CCOO presenta acto de conciliación por el cierre parcial de la línea ferroviaria Madrid-Cuenca-Valencia

Els indicato pide a la Dirección General de Trabajo que reconozca el incumplimiento de la obligación de solicitud y emisión del preceptivo informe de los Comités de Empresa de Adif y Renfe

CCOO ha presentado acto de conciliación frente a las entidades públicas empresariales Adif y Renfe, por el cierre parcial que están llevando a cabo de la línea 310 (Madrid-Cuenca-Valencia).

Según indica el sindicato en su página web, en el acto de conciliación han pedido a la Dirección General de Trabajo que reconozca «el incumplimiento de la obligación de solicitud y emisión del preceptivo informe de los Comités de Empresa de ambas entidades antes de cualquier actuación en relación con las modificaciones indicadas en el hecho primero de esta papeleta; la nulidad, subsidiaria anulabilidad, de todo lo actuado mientras no se cumpla la legalidad vigente en materia de consulta, negociación con los representantes de los trabajadores; la paralización y reversión de las actuaciones llevadas a cabo hasta el momento; y la paralización del periodo de consultas abierto de acuerdo a los artículos 40 en relación con el 41.4 del ET, procedimiento de traslado por movilidad geográfica».

«Todo ello, en sede laboral, lo que se une a las actuaciones llevadas a cabo en vía administrativa y a través de los Consejos de Administración de ambas EPEs. Son muchas las razones que venimos manifestando para oponernos al cierre de ésta y de cualquier línea ferroviaria en tiempos en los que el cambio climático nos debe llevar por la senda de la expansión y nunca del cierre ferroviario», subryaa el comunicado.

En esta ocasión, además, censuran «tanto al Ministerio de transporte, movilidad y agenda urbana, como a las entidades antes citadas, la falta de respeto y vulneración de los derechos de las personas trabajadoras afectadas por este cierre, así como de la potencial plantilla afectada por supresión de servicios ferroviarios y, muy especialmente, la vulneración de derechos que afecta a los órganos de representación de las personas trabajadoras en Adif y en Renfe». 

«Seguiremos en la batalla porque no hay Democracia ni Estado de Derecho sólidos sin un respeto profundo y absoluto a las normas legales y constitucionales que regulan la convivencia laboral y ciudadana», concluyen.