El pasado sábado 10 de junio, en la iglesia del Real Hospital de Santiago de Cuenca, bajo el patronato de las Órdenes Militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa, y en compañía de las hermanas de La Congregación de Hijas de la Caridad, se celebraron los solemnes actos de jura y recibimiento de cuatro nuevos miembros de la Asociación de Hijosdalgo y Guisados de Caballo de Cuenca.
La celebración corrió a cargo del padre capellán de la agrupación, don Declan Huerta y Murphy, con la presencia de don Fernando Martel y Martel, conde de Valverde y marqués de la Garantía, acompañado de su esposa, Dña. María Jesús Cano y Domínguez, e hijos.
Una vez celebrados los ritos iniciales y la liturgia dela Palabra, los postulantes encomendados a la advocación de la Asociación: el Espíritu Santo, y al patrón de la misma: el apóstol Santiago, juraron defender los principios e ideales que inspiran la Asociación de Hidalgos y Guisados de Cuenca, guardar todas las obligaciones señaladas en sus Estatutos, colaborar y cumplir las órdenes de su Junta Directiva. También, se juramentaron para tratar en forma digna y respetuosa a los demás asociados, obrar siempre con honradez, buena fe, sentido del deber y vocación de servicio, así como, mantener vivos y promover los valores inherentes a la Nobleza, al Humanismo cristiano y al Magisterio de la Iglesia, procurando el bien común y manteniendo una actitud proactiva comprometidos con la tradición nobiliaria española y, en general, realizar cuantos actos redunden o puedan redundar en mayor auge de nuestra Asociación, de la Corona, de Cuenca y de España. Seguidamente, se les entregaron los títulos correspondientes, pasando a formar parte de la Asociación los señores: D. José María Huerta y Eguiluz, apadrinado por su hijo D. Declan Huerta y Murphy; D. Antonio de Alarcón y Pastor, apadrinado por D. Rodrigo de Luz y Carretero; D. Luis Óscar Moreno y de la Cerda, por poderes, recogiendo su título, D. José María Huerta y Eguiluz; D. Antonio de Sotomayor y Carlo, por poderes recogiendo su título el secretario, D. Juan Ramón de Luz y Carretero.
Concluyendo la ceremonia con la Marcha Real-Himno de España. A continuación, se ofreció un ameno y agradable vino español en el entorno incomparable de la Terraza Jardín del Real Hospital. Para finalizar, tuvo lugar una cena de gala en el comedor refectorio del Parador nacional, antiguo monasterio de San Pablo, de Cuenca.
