Cuenca vivió ayer el último gran concierto en directo del programa musical de la Feria y Fiestas de San Julián 2025, y lo hizo por todo lo alto. El festival Indiespensables se alzó como uno de los platos fuertes de la programación: música sin tregua desde el atardecer hasta bien entrada la madrugada, un numeroso público entregado y momentos que se quedarán grabados en la memoria colectiva con la complicidad entre los artistas que formaban el cartel.
El recinto abrió puertas a las 18.00 horas con una enorme cola de asistentes, imagen que se ha repetido durante los tres días de estreno del nuevo recinto de conciertos anexo a La Fuensanta y, apenas media hora después, los primeros acordes de Das Model marcaron el arranque. Los conquenses, orgullosos anfitriones, demostraron que el indie también tiene raíces locales y calentaron el ambiente con su energía cruda y algunos de sus éxitos más reconocibles.
A las 20.00 horas el testigo pasó a Sexy Zebras, que desplegaron hora y media de indie sin filtros, con riffs abrasivos y una actitud que hizo vibrar al público. El calor del escenario ya era notorio cuando llegó uno de los momentos más esperados: Dani Fernández subió a escena a las 21.30 horas para un concierto que fue pura comunión con sus seguidores. Durante dos horas, el de Alcázar de San Juan se vació entre gritos, coros y móviles iluminando la noche conquense anticipando que algo especial iba a suceder esa noche sobre el escenario.
Con un recinto absolutamente rendido a la música, alrededor de las 23:30 horas Viva Suecia arrancó su esperado directo. Himnos coreados a pleno pulmón, saltos en cada estribillo y, como guinda, ese momento mágico cuando llamaron de nuevo a Dani Fernández al escenario para cantar juntos Lo siento. El público explotó, consciente de estar viviendo el instante más especial de la noche.
El festival se cerró a la 1.00 con la sesión frenética de We Are Not Djs, que transformaron la explanada en una pista de baile multitudinaria, hilando éxitos hasta agotar las fuerzas de los más resistentes. Con este maratón sonoro, Indiespensables puso el broche de oro a los conciertos de San Julián 2025, dejando el listón alto para futuras ediciones. Mucha gente, mucha música y un ambiente de fiesta que coronó a Cuenca como capital indie por una noche.
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