Se han instalado una serie de topes de piedra en el parking del Paseo de San Antonio con el objetivo de impedir que los vehículos estacionen fuera de las plazas señalizadas. Esta medida busca garantizar el buen uso de las instalaciones y mantener la seguridad vial dentro del recinto. Precisamente en la zona de estacionamiento, tal y como señaló el alcalde de Cuenca durante la inauguración, se redujo el número de plazas previstas inicialmente para incorporar zonas específicas para motos y un recorrido único de entrada y salida.
La acción disuasoria llega semanas después de que la Policía Local de Cuenca recordase a través de sus redes sociales que aparcamiento cuenta con plazas perfectamente delimitadas y señalizadas y que «no está permitido estacionar fuera de ellas». En su comunicado insistían también en la importancia de respetar la señalización “para garantizar la seguridad, el buen uso del aparcamiento y evitar denuncias”.
El aparcamiento, que se inauguró el pasado mes de agosto tras la recepción de las obras por parte del Ayuntamiento y la Diputación Provincial, dispone de 53 plazas para turismos y cinco para motocicletas, y forma parte del Plan XCuenca, junto al estacionamiento del Paseo del Ferrocarril, que suma 254 plazas más en zona blanca. Sendos aparcamientos suman una inversión conjunta de un millón de euros.