La Plataforma en Defensa del Patrimonio tacha de «chapucera» la reforma interior de la Casa del Corregidor

Suman a "este bodrio", tal y como lo califican, otros proyectos de reforma realizados con anterioridad como el de la Torre de Mangana y el Jardín de los poetas

La Plataforma en Defensa del Patrimonio de Cuenca tilda de “chapucera” la reforma de la Casa del Corregidor, cuyo interior mostró Voces de Cuenca este martes tras once años de rehabilitación del edificio. Desde la citada plataforma no entienden «la inversión cercana a 1,5 millones que el Ayuntamiento ha destinado a este edificio: “una desgracia que ha costado mucho dinero y mucho tiempo, y que ha dado como resultado estos lamentables espacios sin personalidad y sin sentido”, apuntan.

Además, critica varios de los elementos de los interiores, aseverando que “si por fuera el resultado de fachadas y elementos secundarios es acertada; por dentro, en cambio, comprobamos con estupor detalles que claman al cielo”, expone la plataforma a través de una publicación en su cuenta de Facebook.

Asimismo, valoran de forma negativa la reforma concreta de los “suelos de baldosas prefabricadas nuevas, perfectamente colocadas en una alineación que ataca estéticamente de manera directa el encuentro con los muros de piedra irregulares”; los “techos y paredes de pladur que convierten las estancias en insustanciales” y “los plafones de luz, propios de oficinas de tercera o de tiendas de ropa”. También reprochan al Ayuntamiento la eliminación de la escalera por una nueva  cuya barandilla consta de unos barrotes de hierro “ridículamente delgados”; así como “la calidad de los materiales empleados” y “la ausencia absoluta de criterio a la hora de iluminar las estancias”.

Desde la plataforma aseguran que “lo que era predominante ha pasado a ser residual y secundario”. Apostillan el “naufragio” de un edificio en el que todavía queda “algún resto: alguna puerta antigua, varias paredes de piedra y testigos escasos de zapatas, vigas y tirantes de madera”. A lo que añaden no estar sorprendidos de dichos cambios: “ya sabíamos, y alertamos de ello, que el Consorcio ciudad de Cuenca había liderado y tolerado la demolición de forjados, el panelado con pladur de techos y paredes, la destrucción de alfajes y suelos de barro cocido antiguo”.

Desde la asociación no se entiende que “este bodrio”, como lo califican, “haya logrado pasar todos los filtros legales sin que nadie haya alertado de las deficiencias ni se haya opuesto a él con firmeza”. Además, aseguran que esta es una muestra para corroborar “la falta de nivel de este Consorcio, de los técnicos implicados y de los responsables que han tenido en sus manos el proyecto, los planos y las propuestas”. Suman a este proyecto, otros como el de la Torre de Mangana y el Jardín de los poetas, en los que “hay mucho que mejorar” y donde se podría “evitar tanta mediocridad”.