La ciudad de Cuenca regresa a cifras prenavideñas tras menguar los casos de COVID un 62% en una semana

Entre el 8 y el 14 de febrero se detectaron 46 infecciones en la capital conquense. La incidencia acumulada a siete días pasa de "riesgo muy alto" a "alto"

La curva de nuevos contagios de COVID-19 en la ciudad de Cuenca encadena cuatro semanas de descensos. Según los datos recién publicados por la Consejería de Sanidad, entre el 8 y el 14 de febrero se detectaron 46 infecciones. Desde el periodo comprendido entre el 7 y el 13 de diciembre no había una cifra tan baja.

Este regreso a números prenavideños se ha alcanzado tras una reducción del 62% (de 122 a 46) respecto a los diagnósticos de la semana anterior, lo que deja la media diaria en la capital conquense en 6,57 nuevos casos. Es una cantidad menor incluso que la se producía a finales del verano, en el ecuador de septiembre, cuando cada jornada se sumaban entre 7 u 8.

La semana es la última en la que estuvieron vigentes las medidas de Nivel 3 reforzado, ya que fue el viernes 12 cuando entró en vigor un alivio de las restricciones en el que ahondará un Consejo de Gobierno extraordinario convocado para este sábado.

La incidencia acumulada a catorce días decrece también, exactamente hasta los 307.18 casos por 100.000 habitantes, un tasa muy pareja a la medida a 3 de enero, cuando la tercera ola pisaba el acelerador y comenzaba a dispararse la incidencia. A pesar de la notable mejoría, el indicador sigue por encima de los 250 afectados/100.000 habitantes, la frontera numérica a partir de la que las autoridades sanitarias consideran que un territorio está en «riesgo muy alto».

La ciudad abandona esa catalogación y baja al escalón inmediatamente inferior, el de «riesgo alto», si se tiene en cuenta la incidencia acumulada por 100.000 habitantes a siete días, que se sitúa en 84,11. Roza ya el «riesgo medio» que marca la franja entre 25 y 75. Es verdad que este indicador puede sufre mas la distorsión de la provisionalidad de los datos, ya que la Consejería de Sanidad habitúa a corregir al alza de una semana a otra sus cifras de contagios, pero más allá de esta advertencia metodológica, es evidente la agudización de la tendencia descendente.