Iniciativa para crear un monumento en homenaje a las víctimas de la COVID-19 y a los que luchan contra ella

La idea la ha lanzado la Parroquia de San Julián, que ha comenzado a dar los primeros pasos para hacerla realidad, aunque desde la entidad insisten en que quieren que sea "un proyecto de todos y símbolo de unidad"

16 de marzo de 2021. Es la fecha marcada como objetivo para inaugurar un monumento en la ciudad de Cuenca que homenajee a todas las víctimas de la COVID-19 y, también, a aquellos que distintos frentes han trabajado y luchado contra la enfermedad.

El día elegido no es un capricho ni fruto de la aletoriedad. En esa jornada se cumplirá un año desde el primer día laborable del confinamiento, según recuerdan desde la Parroquia de San Julián. Esta entidad es la que ha lanzado la idea de crear una obra monumental que deje constancia de lo ocurrido durante la pandemia y la que está dando los primeros pasos para hacerla realidad, aunque se aleja de cualquier pretensión de monopolizar una iniciativa «que tiene que ser de todos los conquenses y un reflejo de unidad».

El proyecto está todavía en un estado embrionario, si bien se han definido ya algunos de los apartados que podría incluir, a modo de boceto. Así, se ha pensado en una base que simbolice alegóricamente Cuenca; una sección en la que estén representados los enfermos y fallecidos y otra, enlazada con la anterior con algún recurso artístico, dedicada a los sanitarios y otros profesionales que han estado en primera línea. También se ha pensado en algún elemento para reconocer a la población general, la que se quedó mayoritariamente en casa para frenar el avance del virus. «La idea es que se vea que todo el mundo ha desempeñado su papel en la victoria que para entonces esperamos que se haya conseguido contra el virus», detallan desde esta comunidad parroquial situada en el capitalino barrio de la Fuente del Oro.

Precisamente en este área de la ciudad es donde se barajan varias ubicaciones para colocar el monumento. Se ha pensado en la parte más alta del barrio, donde confluyen las calles San Damián y San Cosme, porque desde allí se pueden otear el Casco Antiguo, el Hospital Virgen de la Luz y el Cementerio Municipal ‘Cristo del Perdón’. También en la zona de la Plaza Reina Sofía, la rotonda del consultorio médico fuentedeloreño o en las cercanías del Hospital Recoletas.

En cualquier caso, insisten, son únicamente posibilidades ya que la decisión final del emplazamiento dependerá de diversos factores como la disponibilidad de espacio y la autorización del Ayuntamiento, al que se quiere implicar en este proyecto que al igual que al Obispado, Diputación de Cuenca y todas las entidades públicas y privadas que se quieran sumar, al igual que ciudadanos

También se ha hablado ya con un escultor y un diseñador gráfico, ambos conquenses, para que vayan avanzando en la concepción del monumento y su incardinación en el entorno urbano, pero hasta que la iniciativa no está más maduro prefieren no desvelar sus nombres. 

Intensa actividad

Incluso antes de que comenzara el Estado de Alarma, la Parroquia de San Julián de la Fuente del Oro ha desarrollado una intensa actividad para estar cerca de sus fieles a pesar de la distancia obligada por las medidas de prevención. Fue pionera en la retransmisión de sus cultos a través de YouTube, que mantiene a pesar de la reapertura parcial de los templos, y ha usado esa plataforma audiovisual para contar cómo han vivido muchos vecinos el confinamiento. El testimonio de jóvenes, mayores, policías, sanitarios y empleados ha sido una constante en estas semanas en las que se han celebrado eucaristías con un transfondo temático especial, teniendo especialmente presentes, por ejemplos, a los trabajadores del Hospital, a los comerciantes de la Fuente del Oro o a los parroquianos que están fuera de Cuenca.