El baile de fechas que anuncian la apertura del nuevo hospital parece haber parado, al menos de momento, y el gerente del Área Sanitaria de Cuenca, Jose Antonio Ballesteros, ratifica las declaraciones de la semana pasada del consejero de Sanidad, Jesús Fernández, en las que aseguraba que el nuevo centro hospitalario recibirá los primeros pacientes de agosto. “Estamos a días de que la estructura eche a andar con pacientes, vamos a pasar de Atapuerca a pleno siglo XXI”, ha aseverado con rotundidad Ballesteros.
El gerente ha recordado que la transición comenzará con la zona ambulatoria, en la fachada lateral compuesta por cuatro plantas y, hasta que no se complete, no se avanzará hasta otra área. “Se arrancará por el pasillo azul- en la primera planta-, donde se situarán las zonas de extracciones y todo un pasillo de radiología. Justo ahí se está terminando de instalar la mejor resonancia magnética que tiene el Servicio Público de Salud a nivel nacional, puntera en tecnología y en inteligencia artificial”, se ha congratulado Ballesteros.
En el inicio de actividad estarán implicadas dos salas de radiología convencional con telemando y otra con TAC. “Una vez completemos ese pasillo iremos implementando toda la fachada lateral hasta que llegue el momento en el que decidamos cerrar el servicio de urgencias del Virgen de la Luz y justo en ese minuto abrirlo en el nuevo hospital”, ha apuntado.
Ballesteros ha recordado enorgullecido de “estar a días de finalizar una fase fantástica”. En alusión a las visitas de todo el personal del Virgen de la Luz (los 1.700 profesionales más el grupo de sustitutos) que comenzó a conocer el nuevo hospital a final del mes de abril. “Se está haciendo una visita espectacular, no solo para que el personal conozca las instalaciones, sino también los circuitos”. Con ello, desde la gerencia de Cuenca han querido prevenir situaciones que se han derivado en la apertura de otros hospitales y “que les ha generado problemas a posteriori”.
