La madrugada de este lunes, 8 de septiembre, los vecinos de un bloque de viviendas situado en la calle Segóbriga de la capital conquense han tenido que ser desalojados debido a riesgo estructural en el inmueble según ha informado el Servicio de Emergencias 112 de Castilla-La Mancha a VOCES DE CUENCA.
La Policía Local de Cuenca ha señalado por su parte que sus agentes, en coordinación con el Servicio de Bomberos y Protección Civil, llevaron a cabo esta acción preventiva en el barrio conquense del Pozo de las Nieves «tras detectarse daños estructurales que comprometían la seguridad del inmueble».
Los vecinos alertaron sobre ruidos extraños y el hundimiento de un pilar y varios tabiques, lo que motivó la intervención de los servicios de emergencia. Tras la inspección inicial, se decidió evacuar de manera inmediata a los residentes como medida de precaución.
En total, fueron desalojadas unas 20 personas distribuidas en 7 viviendas. La mitad pudo establecerse temporalmente con familiares, pero dos familias, con un total de 6 menores y 4 adultos, requirieron realojamiento provisional en hoteles de la ciudad.
Los bomberos aseguraron la zona y el edificio permanecerá precintado hasta que los técnicos realicen una inspección exhaustiva y determinen si será posible volver a habitarlo. Por el momento, el estado definitivo del inmueble aún no se conoce.
Las autoridades policiales hacen un llamado a la precaución y recomiendan a los vecinos mantener la distancia hasta que se garantice la seguridad del edificio.
Fuentes del Ayuntamiento han explicado asimismo que hace algo más de un mes se hizo una visita al edificio por parte de técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo a petición de la comunidad de propietarios para comprobar el estado del edificio y que se les planteó que tenían que hacer un refuerzo estructural.
La comunidad de vecinos solicitó licencia para llevar a cabo este refuerzo estructural y se les concedió, llevando a cabo dicha comunidad la obra recientemente. Dado el suceso, los técnicos de la GMU procederán a hacer este una visita para ver qué ha sucedido y el estado del inmueble, que según remarcan desde el Consistorio «es de propiedad privada».

