Cesa Miguel Ángel Uriondo, el asesor del Ministerio que ridiculizó las protestas contra el cierre del tren

La marcha de Isabel Pardo de Vera tras la crisis por los trenes de Asturias y Cantabria se salda también con la salida del cargo que comparó las manifestaciones contra el Plan XCuenca con las colas para comprar el iPhone

Miguel Ángel Uriondo, el asesor de comunicación del Ministerio de Transportes que ridiculizó las protestas contra el cierre del ferrocarril convencional Aranjuez-Cuenca-Utiel, ha cesado este miércoles de su cargo, según ha compartido él mismo en su perfil en la red profesional Linkedin. La suerte de este licenciado en Periodismo ha ido pareja a la de Isabel Pardo de Vera, quien había dimitido el lunes como secretaria de Estado del Transportes, Movilidad y Agenda Urbana por el escándalo del diseño de los trenes con dimensiones inadecuadas para caber en los túneles de Asturias y Cantabria. Fue Pardo de Vera la que tuvo a Uriondo como jefe de gabinete en Adif cuando ella presidiía la empresa pública de gestión de infraestructuras ferroviarias, después lo ‘fichó’ para el Ministerio (también fue elegido consejero de Renfe y de Puertos del Estado) y ahora acaban su andadura gubernamental con apenas dos días de diferencia.

«Estoy abrumado por el cariño que he recibido y sentía que debía a mucha gente una despedida a la altura. He fracasado claramente, pero al menos lo he intentado. Resumen: ella mola y nos vamos sin rencor y con la sensación de deber cumplido. Todo el que nos han dejado», señala a modo de presentación de un texto más extenso que sirve principalmente para reivindicar el legado de su antigua jefa.

«Soy incapaz de explicar las causas que han llevado a su salida del Ministerio y, viendo los mensajes que estoy recibiendo, existe una sensación de incredulidad colectiva. La teoría general es que se trata de una victoria más de los políticos frente a los técnicos. La mía personal es que lo realmente extraordinario es que una técnica como ella haya tenido durante tanto tiempo la capacidad de desbloquear proyectos y transformar para bien la realidad. Nunca había habido una mujer como presidenta de Adif, y además era una técnica de la casa. Tampoco creo que haya habido nunca una secretaria de Estado que supiese decirte dónde hay columnas de grava. Una que sea capaz de identificar cada pequeña parte de los avances en una obra porque en sus inicios profesionales se pasó mucho más tiempo con las botas y el casco que en las juventudes de un partido. No tengo claro que vaya a volver a haber alguien como ella en esta posición», ha señalado en una laudatoria despedida Uriondo.

Ella repasa atribuye a Pardo de Vera el mérito de hitos como la llegada de la Alta Velocidad a Murcia y Galicia o la liberalización de la competencia ferroviaria y resta importancia al episodio que ha terminado con la renuncia. «Ha sido sólo un retraso convertido en meme por un agente del caos y por jetas que no caben por los túneles», defiende en un texto en el que no hay referencia alguna a la supresión de la línea ferroviaria tradicional que recorre la provincia de Cuenca. Un cierre cuyo último trámite lo tomó el Consejo de Ministros el pasado martes, un día después del anuncio de la dimisión de la secretaria de Estado y uno antes de la marcha de Uriondo.

El asesor de comunicación, que como periodista trabajó en Actualidad Económica, Sabemos o El Español, fue un vehemente y polémico defensor del Plan XCuenca en las redes sociales. El 30 de noviembre de 2021, cuando se presentó esta iniciativa, se empleó a fondo en su perfil de Twitter para defender las bondades de esta iniciativa.

Aseguraba en este hilo que la actualización de la línea supondría «millones de euros que no irían a ninguna parte» y que «donde no hay población, hay formas mejores de atender la movilidad y gastar el dinero de nuestros impuestos» que el ferrocarril. Además aseguraba que en el diseño del Paln «hemos escuchado a mucha gente, y hemos intentado integrar distintas sensibilidades».

Sus tesis despertaron un intenso debate, con algunas adhesiones y un numero mayor de críticas y respuestas. Sin embargo, la tensión no se disparó hasta el 19 de diciembre de ese mismo año, cuando se celebró una manifestación por la permanencia del servicio de tren. Sin mencionarla explícitamente, se refirió sarcásticamente a la concentración -que reunió a un millar de asistentes- minusvalorando su alcance.

Sus palabras desembocaron en una tormenta de indignación. El autor del mensaje terminó por impedir que se pudiese contestar el tuit, bloqueo numerosas cuentas que le insultaron o se mostraron en desacuerdo y hasta puso el candado para que no fuera público el contenido de su perfil. Hubo críticas, peticiones de cese, dimisión o retos a debates desde colectivos como Pueblos Vivos, la Plataforma en Defensa del Ferrocarril, Manifiesto por Cuenca, Izquierda Unida, Podemos la Asociación de Vecinos del Centro y el Partido Popular, entre otros. Desde entonces la implicación pública y personal de Uriondo como apologeta del Plan disminuyó considerablemente.