Este domingo Cuenca capital ha acogido la manifestación del 1º de mayo por el Día Internacional del Trabajo. Una jornada tranquila en una soleada mañana que se ha visto alterada cuando, ya en la Plaza de España, integrantes del Frente Obrero han manifestado sus discrepancias con los principales sindicatos, CCOO y UGT.
El movimiento, que ha contado con su pancarta dentro de la manifestación, ha comenzado ha mostrar su disconformidad cuando una de sus integrantes, megáfono en mano, ha empezado a dar un discurso crítico con los líderes socialistas -citando directamente a Darío Dolz y su “inactividad” con el cierre de la planta de Gamesa- y con los principales sindicatos. Los integrantes del Frente Obrero cantaban proclamas como ‘que viva la lucha de la clase obrera’, ‘Comisiones y UGT, sindicatos del poder’ y ‘Cuenca no se vende, Cuenca se defiende’, entre otras, haciendo que fuera muy complicado seguir la lectura del manifiesto que en ese momento estaba haciendo de forma paralela el secretario general de UGT, Vicente Martínez.
Tras un par de minutos se ha acercado hasta ellos Pedro Lucas, histórico líder sindical conquense de CCOO, para recriminarles a la cara su actitud. La tensión ha ido en aumento durante unos pocos segundos en el que unos y otros han intercambiado reproches a voces, pues rápidamente se han acercado dos agentes de Policía Nacional y uno de Policía Local, cuya mera presencia ha sido suficiente para parar este conato de discusión.
Posteriormente una de las pancartas de CCOO y UGT se ha colocato delante de la del Frente Obrero, dejando en un segundo plano a esta, que poco después se retiraba de la concentración principal.
Paralelamente y mientras Vicente Martínez leía el manifiesto, a pocos metros un hombre -no perteneciente al movimiento del Frente Obrero- increpaba al secretario provincial del sindicato, pidiéndole que se quitara la pegatina de UGT. Otro sindicalista se le ha acercado para pedirle que dejara de molestarle mientras leía.