Page opina que «no se puede usar el idioma como privilegio para opositar»

El presidente autonómico defiende que "hay que garantizar los derechos de todos los españoles a la hora de poderse comunicar en cualquier lugar del país"

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, opinó este martes por la noche en una entrevista en el Canal 24 Horas de Televisión de España que hay que garantizar los derechos de todos los españoles a la hora de poderse comunicar en cualquier lugar del país. Considera que «no se puede utilizar el idioma como elemento arrojadizo o de privilegio como es el caso de la opción a opositar» ha dicho, ya que entiende que «esa situación discrimina a unos españoles frente a otros».

El jefe del Ejecutivo remarcó que el modelo de la Constitución Española es muy válido ya que indica que todos los españoles tienen el derecho y la obligación de hablar español, «lo que hay que garantizar es que los niños salgan sabiendo perfectamente castellano y también catalán», matizó a la vez que denunció que «en muchos colegios en Cataluña se está violando la ley actual».

En esa línea destacó la importancia creciente de la lengua española en el planeta y los millones de personas que las hablan y apuntó que, «a parte de su eficacia» hay que tener muy presente «la garantía de los derechos del resto, de los que no vamos a hablar nunca catalán, ojalá me lo hubieran enseñado de chico, pero yo no tengo ni en la intimidad ni en público la capacidad de hablarlo y, sin embargo, quiero ir como español a Cataluña y no tener que leer los carteles en catalán, poderlos leer también en castellano, ese es un derecho, eh».

Mostró su desacuerdo en que «haya gente que pueda presentarse a las oposiciones aquí y sin embargo no puedan presentarse a las oposiciones donde haya otro idioma si no pasas por tener que hablarlo». Otra «cosa diferente», matizó el presidente, «es que a quien haya aprobado se le exijan cursos de formación en catalán o en balear o valenciano, porque ya hay muchos idiomas de todo tipo en España, pero que no sea condición sine qua non».

El dirigente autonómico mostraba así su postura tras la polémica generada después de que el Congreso aprobara una enmienda al proyecto de la nueva Ley de Educación -la llamada Ley Celalá- aprobada por su partido, el PSOE, con Unidas Podemos y Esquerra Republicana de Catalunya que elimina el apartado que definía al castellano como la lengua vehicular en la enseñanza.

Desde el PP de Castilla-La Mancha han pedido a Page que los nuevos diputados nacionales socialistas que representan a las provincias de la región voten en contra de la nueva norma para frenar su aprobación.

Por otro lado, y en la misma entrevista, Page defendió que «esta esperada recta final» de la pandemia de la COVID-19 hay que abordarla con una estrategia nacional y «confinar al virus por territorios».