El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, preguntado por las últimas declaraciones del ministro de Consumo sobre el sector agroalimentario, ha manifestado que Garzón «tiene que cambiar su criterio». “Yo doy mi opinión, sinceramente, creo que no se puede hacer daño gratuitamente a un sector tan importante y, sobre todo, sin fundamento”, ha dicho. Para Emiliano García-Page, la postura del ministro Garzón “no tiene nada que ver con el PSOE” y ha considerado que “cuando alguien mete la mata” y “no es la primera vez”, “lo mejor es rectificar, eso es lo más sabio que hay”.
“No sé si Garzón tenía previsto colarse en el Comité Federal”, ha continuado, pero, a su juicio, “hay que acudir al viejo dicho castellano” que dice que, “cuando el diablo no tiene nada que hacer, mata moscas con el rabo”. “Normalmente, uno está acostumbrado a que los errores en la vida y en la política van en la misma proporción a la carga de trabajo, aquí se invierte la cosa, es una experiencia nueva”, ha ironizado.
Asimismo, ha defendido que la calidad de nuestra carne “es indiscutible, no ha habido en la vida unos controles sanitarios de la ganadería y del sector tan extraordinarios que, además, se está promocionando en el mundo de una manera extraordinaria”.
Con ello, ha explicado que en Castilla-La Mancha el debate sobre las macrogranjas pasa por “pactar con el sector, con todas las partes interesadas, una legislación en condiciones”, ya que “se mezclan muchas informaciones y directivas europeas”.
Lo que queremos, ha dicho, es pactar “para que no nos atropellen los acontecimientos” y “hacer una política equilibrada que contemple los intereses ambientales y también los intereses de las nuevas políticas ambientalistas y animalistas que están surgiendo en España con lo que es la eficacia de un sector tremendamente importante” en nuestro país. Y ha sostenido que “nosotros vamos a hacer las cosas con cabeza”.