La diputada de Ciudadanos en el parlamento autonómico Úrsula López ha remarcado que Castilla-La Mancha es la única comunidad autónoma en España que hoy por hoy «no atiende como una realidad la creación de recursos para la creación de una Unidad de Cuidados Paliativos Pediátricos, como sí lo hacen el resto de las autonomías de España», ha lamentado profundamente.
La diputada de Cs ha explicado que la Proposición No de Ley de Cuidados Paliativos Pediátricos llevada hoy a las Cortes y que ha sido «aprobada por unanimidad», quiere hacer entender que «no podemos considerar a los niños como ciudadanos de segunda sino como ciudadanos sujetos de Derecho. Si alguien hoy viene a hablar de Cuidados Paliativos y habla de adultos, nos parecería una falta de respeto a nuestros niños y adolescentes», en referencia a posibles explicaciones que pudieran dar dirigentes de Sanidad.
López ha afeado al Ejecutivo regional, que desde 2014, existe un documento «Cuidados Paliativos Pediátricos en el Sistema Nacional de Salud», que recoge los «Criterios de Atención», publicado por el Ministerio de Sanidad, donde se establece que, «las comunidades autónomas elaborarán las especificaciones necesarias para que la población pediátrica que lo precise reciba la atención de Cuidados Paliativos que se contempla en la Cartera de Servicios».
Ante este extremo, López, ha rogado al Gobierno regional «la necesidad de crear la Unidad de Cuidados Paliativos Pediátricos de Castilla-La Mancha».
La diputada de centro, visiblemente emocionada, ha relatado la importancia que para los niños, adolescentes y jóvenes que viven con enfermedades incurables representa la necesidad de unos cuidados paliativos. López ha indicado que «la edad no tendría que ser un impedimento para que cada uno de nosotros reciba lo que necesita». Además, ha reflejado que se ha de «vivir lo mejor posible en el lugar que sea bueno para ellos. Si puede ser, mejor en casa».
En lo que respecta al ingreso en un hospital, López ha indicado que «si tenemos que estar en un hospital queremos poder estar con las personas que son importantes para nosotros. Poder seguir asistiendo al colegio, en la medida que sea bueno para nosotros. Y si no es posible, que el profe venga a casa».
López ha pedido atención y sensibilidad para estos niños, «que nuestras familias y los médicos nos expliquen, si lo necesitamos, qué es lo que nos está pasando y lo hagan de modo amable y comprensible por nosotros. Que cuando haya que tomar decisiones sobre nosotros se nos tenga en cuenta y que se tenga en cuenta nuestro propio bien, antes que el de los que nos cuidan o nos atienden».
