El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha mantenido este miércoles una reunión con el comisario europeo de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen. En este encuentro también han estado presentes representantes de las organizaciones profesionales agrarias y de las cooperativas de la región, el vicepresidente segundo de la Junta, José Manuel Caballero y el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martinez Lizán. La directora general de Asuntos Europeos, Nazaret Rodrigo y la eurodiputada Cristina Maestre han asistido del mismo modo al encuentro con Hansen.
A su salida de esta reunión, el jefe del Ejecutivo regional ha manifestado que Castilla-La Mancha ha encontrado «un aliado confeso, un aliado declarado del campo”. Además, Page se ha mostrado convencido de que “el comisario tiene bastante claro lo que pasó en las últimas elecciones europeas y que se ha de dar un giro sereno entre unas políticas y otras, de manera que el campo, frente a quien lo pudiera entender como culpable de los problemas de sostenibilidad, es en buena medida la víctima”.
Sobre la política agraria el presidente castellanomanchego ha señalado que Hansen «va a defender nuestro criterio con la Política Agraria Comunitaria y además, hemos encontrado a un comisario muy sensibilizado por los problemas del agua”. Una de las principales preocupaciones que ha mostrado Page es que el fondo de la Política Agraria Comunitaria siga siendo único y que «no se empiece a quitar el problema de encima a la Unión Europea para dejarlo en manos de los estados”, convencido de que “eso sería un retroceso, pero creo que salimos con razonable esperanza de que eso pueda mantenerse”.
García-Page, que ha aprovechado la ocasión para invitar al comisario Hansen a visitar la región, ha explicado que le han presentado un memorándum “unánime en la región que yo creo que comparte”, y se ha mostrado optimista ante las intenciones del responsable europeo de la política agrícola.