El desabastecimiento de amoxicilina que se ha vivido en España en las últimas semanas, y que también afectó a Cuenca, ha puesto en alerta a pacientes que han sufrido esta falta de suministro en otros fármacos. La presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cuenca, Luz Moya, ha señalado que en la actualidad “no hay un desabastecimiento grave”, ya que estas carencias en el stock se producen de forma “habitual”, pero reclama medidas para tratar de paliar sus efectos, como que se modifique la legislación para facilitar la sustitución de medicamentos y que que se agilice la comunicación con los médicos a través de herramientas como la receta electrónica.
Respecto a la comunicación en recetas electrónicas, la farmacéutica ha destacado que es una “demanda histórica que todavía no se ha conseguido articular” y que permitiría “comunicarnos de una manera más fluida con los médicos”. La idea es sustituir fármacos en el propio establecimiento en los casos en que sea posible y evitar al paciente esperas y retrasos en su obtención. Moya ha subrayado que en el mundo rural es “mucho más fácil” porque ya cuentan con este hilo directo de comunicación.
Además, ha detallado que “a veces hay problemas porque lo que no se puede sustituir en las oficinas de farmacia es la forma farmacéutica, con esto me refiero con que a veces está prescrito un determinado producto en comprimidos y sí que lo tenemos en cápsulas o en sobres, y en la oficina de farmacia la legislación actual no nos lo permite sustituir”. Como medida para solventar los problemas añadidos al desabastecimiento que genera esta situación, propone que se modifique la legislación para que puedan realizar estos cambios en las propias farmacias.
