La provincia de Cuenca tiene en torno a 225 personas que se dedican a la prostitución en 12 clubes y 31 pisos

La pandemia ha rebajado esta actividad en torno a un 40% en territorio conquense aunque ha obligado a volver a ejercer a personas que la habían abandonado y se ha detectado un aumento en viviendas particulares

(Imagen de Gerd Altmann en Pixabay )

La pandemia ha provocado un notable descenso de la prostitución en la provincia de Cuenca. Según los datos correspondientes a 2020 aportados por la Asociación «In Género», la provincia de Cuenca contabiliza en torno a 225 personas que se dedican a la prostitución, frente a las 326 registradas el ejercicio anterior; en 12 clubes y 31 pisos, cuyo número ha aumentado durante la crisis sanitaria.

Miguel Ángel Del Olmo, coordinador nacional de «In Género» ha resaltado la situación de «extremada vulnerabilidad en la que se encuentran las personas que se dedican a esta actividad. Hasta ahora interveníamos en asuntos de naturaleza social pero este año estamos cubriendo necesidades básicas y estamos trabajando junto al Banco de Alimentos». Asimismo, ha resaltado la necesidad de modificaciones en el marco legal y, en concreto, de normativas como la actual Ley de Extranjería que no facilita el abandono de la actividad y la movilidad a otro ámbito la laboral. Del Olmo ha presentado los resultados del último estudio junto a la diputada de Servicios Sociales, Lorena Cantarero; y la delegada provincial de Igualdad, Lourdes Luna.

La ‘radiografía’ de la prostitución conquense elaborada gracias al trabajo sobre el terreno de In Género revela que de las 225 personas que se dedican a la prostitución atendidas en Cuenca 220 son mujeres, 2 son hombres y 3 son mujeres trans. Los países de procedencia más habituales son Paraguay, República Dominicana, Colombia y Rumanía. De las 220 mujeres sólo cuatro son españolas. El 71,5% realiza su actividad en clubes, «en su mayoría en la carretera de Graja de Iniesta», y un 28,5% en pisos.

La edad media es de 34 años siendo el tramo de edad mayoritario entre 23 y 43 años (95,9%). A continuación se sitúa entre 44 y 56 (10,9%) y, por último, entre 19 y 22 (3,2%). La mayor parte de las prostitutas llevan entre 1 y 3 años en España (42,9%). Llama la atención que el 48% mantiene con su actividad entre 3 y 5 familiares. El estudio señala que un 55,7% de las personas reconoce que vino a España a ejercer la prostitución mientras que un 44,2% no. La inmensa mayoría (86,9%) asegura que no ha ejercido la prostitución fuera de España.

Fenómeno en declive

Cuenca se sitúa en 2020 como la tercera provincia de Castilla-La Mancha con mayor actividad de prostitución ya que contabiliza el 21,7% de las personas atendidas por In Género. Ciudad Real se sitúa en cabeza con el 33,2% seguida de Toledo con el 23,35). Tras Cuenca se encuentra Albacete (13,8%) y cierra Guadalajara (8%).

Miguel Ángel del Olmo ha asegurado que » a pesar de las dificultades que están pasando las personas que se dedican a la prostitución por las circunstancias vinculadas a la pandemia, como el cierre de locales o el propio riesgo de contagios, creemos que es una actividad que está en declive y va camino de desaparecer. Lo que hace falta son medidas amplias para un problema que es complejo. No bastan ayudas económicas sino que se deben complementar con ayudas sociales, laborales, legales,… Exigimos a las administraciones que ayuden, arropen, protejan… a estas personas para que podamos garantizarles que den el paso y abandonen la prostitución «.

El coordinador de In Género ha puesto de relieve que la pandemia «ha supuesto que bastante gente que había abandonado la prostitución haya vuelto después de seis o siete años sin ejercer debido a los ERTEs, el paro,… en gran medida por las cargas familiares que hay que atender». Como prueba de la complejidad del problema, Del Olmo ha recordado un caso de Albacete que tras ofrecerle ayudas «nos dijo que no se la diésemos, que habían abierto ya los clubes y en una semana o dos ella ganaba más de 3.000 euros y que le diésemos la ayuda a otra compañera que sí lo necesitase».

La diputada de Servicios Sociales, Lorena Cantarero, ha ejercido de anfitriona en esta presentación y ha destacado que la institución provincial ha colaborado por primera vez con la labor que hace In Genero con una ayuda de 5.000 euros a través del programa Cuenca Integra, “unas ayudas fundamentales para el equipo de Gobierno como demuestra el aumento de 25.000 euros de esta partida en el presupuesto de 2021”. Además, la responsable de esta área ha invitado a la organización a que concurra dentro de la ayudas destinadas a igualdad que tiene la Diputación y que este año se ha duplicado hasta alcanzar los 100.000 euros.

Por su parte, la delegada provincial de Igualdad, Lourdes Luna, ha puesto en valor el Centro de Atención y Valoración para Víctimas de Violencia de Género existente en Cuenca que este año ha aumentado su número de plazas para atender a aquellas mujeres que han sido víctima de trata de seres humanos.

De izquierda a derecha; Lourdes Luna, Lorena Cantarero y Miguel Ángel Del Olmo