Encontrar algunos medicamentos para tratar la hipertensión en Cuenca se está convirtiendo en misión imposible para los usuarios. La situación es fruto del desabastecimiento que este verano afecta a la provincia, según la red digital de farmacias LUDA Partners, y este tratamiento, junto a los insomnios se han convertido en los medicamentos con mayores problemas de disponibilidad en las farmacias conquenses.
Según el estudio de LUDA Partners, la disponibilidad de estos fármacos se ha visto comprometida en múltiples provincias, generando preocupación tanto en profesionales sanitarios como en pacientes.
Y, aunque no es necesario realizar acopio de medicamentos ni por parte de las boticas, ni de los pacientes, las farmacias comunitarias, a pesar de no ser las causantes de la situación actual, son las que están aportando las alternativas, como en la mayoría de las ocasiones.
Sin embargo, desde LUDA deslizan que, pese que algunos medicamentos pueden tener sustitutos, “si el médico ha prescrito una presentación concreta, los farmacéuticos no están autorizados a cambiar el medicamento del paciente por otro equivalente”. Por ello, si la farmacia no puede dispensar el medicamento debido a que presenta problemas de suministro, el paciente debe regresar al médico, informarle sobre la situación y que este le cambie la receta. “Sin duda, todo un proceso tedioso y que se dilata en el tiempo incidiendo directamente en pacientes con afecciones graves”.
A la cabeza de los medicamentos que están presentando los mayores reportes de incidencias se encuentran Dircoryan, indicado en el tratamiento o prevención de las alteraciones del ritmo cardiaco.
También con incidencias de desabastecimiento, pero en menor medida, se encuentra Ozempic, un medicamento para adultos con diabetes tipo 2 que ayuda al cuerpo a reducir el nivel de azúcar en sangre únicamente cuando está demasiado elevado y puede ayudar a prevenir una enfermedad cardiaca.
También en la línea de un desabastecimiento menor aparece Zopiclona, fármaco semejante a las benzodiazepinas, también conocidos como Fármacos Z, utilizado para el tratamiento, de tipo transitorio e inductor, de situaciones de insomnio crónico o de corta duración.
Es importante señalar que el uso de LUDA por parte de la farmacia suele producirse cuando la botica no tiene posibilidad de abastecerse del producto, por lo que deriva al paciente a otra oficina de farmacia.
No obstante, no es necesario generar alarma, apuntan desde la red de farmacias, ya que estos desabastecimientos pueden ser puntuales y las causas que los originan son muy variadas