El PP advierte del riesgo al que se exponen «pueblos aislados y sin servicios básicos»

Plaza lamenta "la falta de planificación de la Diputación" y enumera numerosas incidencias y problemas en los municipios conquenses

Que la borrasca ‘Filomena’ ha azotado con intensidad la provincia de Cuenca es un hecho que no se podía haber evitado, “pero sí que, dado que las previsiones eran desde hacía días alarmantes, instituciones como la Diputación deberían de haber elaborado un plan que, al menos, hubiera evitado que pueblos de nuestra provincia, sobre todo los más pequeños, se hayan quedado aislados durante días y haber garantizado, al menos, los servicios básicos a sus vecinos”, ha declarado la portavoz del Grupo Popular en la institución provincial, Clara Plaza. La también alcaldesa de Ledaña relata cómo ha habido alcaldes, como el de Víllora, también diputado provincial, que el sábado tuvo que trasladar en su propio coche al Centro de Salud de Cardenete a un vecino para que recibiera asistencia médica de urgencia, cómo el reparto de medicamentos, comida o leña también ha tenido que llevarse a cabo por los propios vecinos de los pueblos, con grave riesgo, o cómo los ocho habitantes de Fuentesbuenas, municipio de Villas de la Ventosa, permanecieron sin agua y sin luz desde el viernes al domingo, “nunca se debería de haber llegado a situaciones como estas”. Monreal del Llano, Parra de las Vegas, Villar de la Encina o Rozalén también han estado incomunicados durante varias horas al igual que Cararscosa de Haro y también de la Sierra donde su alcalde, Alfonso Pérez, relataba que, “en su pueblo tienen exactamente la misma situación y la misma nieve desde el pasado jueves. Hay vecinos que llevan ya cinco días sin poder salir de casa. Ni la Junta ni la Diputación han solucionado su situación”, apunta Clara Plaza.

La portavoz popular ha querido agradecer, no obstante, el trabajo que decenas de operarios llevan realizando incansablemente desde el pasado jueves y la preocupación de los técnicos que, desde diferentes administraciones, han llamado a los alcaldes de los pueblos para interesarse por cómo les estaba afectando la nieve, “pero claro, si la planificación y las decisiones políticas no son las adecuadas o simplemente no hay una previsión, difícilmente se pueden solucionar las demandas de los municipios”.     

Otra de las cuestiones que han agravado la situación provocada en nuestra provincia por la borrasca es el estado de las carreteras. Hoy, lunes, eran varios los pueblos que se quejaban de que, a pesar de que las quitanieves estaban pasando por su zona, la cantidad de sal que se esparcía era insuficiente para combatir el hielo y la nieve, “mucho nos tememos que la Diputación también ha fallado en estos cálculos y en la diligencia en aprovisionarse con rapidez de sal”, ha insistido Clara Plaza, “todavía hay muchas zonas intransitables, carreteras importantes en La Mancha, en los alrededores de localidades como Villaescusa de Haro y Villarejo, Torrubia del Castillo, Osa de la Vega también en La Serranía Baja y la Sierra, afectando a Moya, Cardenete o Carrascosa de la Sierra”. “En Yémeda y en Paracuellos de la Vega, por ejemplo, las granjas están desatendidas, no se puede desplazar nadie para dar de comer a los animales”, explica la portavoz del Grupo Popular.

Clara Plaza también ha querido hacerse eco del “mas que preocupante mensaje difundido en redes por el servicio de bomberos de la Diputación en el que advertían que este fin de semana, y ante una alerta como la que teníamos en nuestra provincia, se encontraban bajo mínimos y con dotaciones extremadamente reducidas”.

Plaza ha concluido pidiendo al equipo socialista de la Diputación que “restablezca, con prioridades y sensatez, lo antes posible la normalidad en nuestra provincia y que también pida a la Junta y al Gobierno de España que contribuyan a esta labor”. “Está claro que si tenemos un área específica en la institución que se ocupa de la despoblación y de nuestro mundo rural lo que no se puede permitir es que en los momentos en los que más lo necesitan nuestros municipios, en medio de una pandemia y con mucha gente mayor viviendo en ellos, se queden incomunicados y sin servicios tan esenciales como la atención sanitaria”.

Que la borrasca ‘Filomena’ ha azotado con intensidad la provincia de Cuenca es un hecho que no se podía haber evitado, “pero sí que, dado que las previsiones eran desde hacía días alarmantes, instituciones como la Diputación deberían de haber elaborado un plan que, al menos, hubiera evitado que pueblos de nuestra provincia, sobre todo los más pequeños, se hayan quedado aislados durante días y haber garantizado, al menos, los servicios básicos a sus vecinos”, ha declarado la portavoz del Grupo Popular en la institución provincial, Clara Plaza. La también alcaldesa de Ledaña relata cómo ha habido alcaldes, como el de Víllora, también diputado provincial, que el sábado tuvo que trasladar en su propio coche al Centro de Salud de Cardenete a un vecino para que recibiera asistencia médica de urgencia, cómo el reparto de medicamentos, comida o leña también ha tenido que llevarse a cabo por los propios vecinos de los pueblos, con grave riesgo, o cómo los ocho habitantes de Fuentesbuenas, municipio de Villas de la Ventosa, permanecieron sin agua y sin luz desde el viernes al domingo, “nunca se debería de haber llegado a situaciones como estas”. Monreal del Llano, Parra de las Vegas, Villar de la Encina o Rozalén también han estado incomunicados durante varias horas al igual que Cararscosa de Haro y también de la Sierra donde su alcalde, Alfonso Pérez, relataba que, “en su pueblo tienen exactamente la misma situación y la misma nieve desde el pasado jueves. Hay vecinos que llevan ya cinco días sin poder salir de casa. Ni la Junta ni la Diputación han solucionado su situación”, apunta Clara Plaza.

La portavoz popular ha querido agradecer, no obstante, el trabajo que decenas de operarios llevan realizando incansablemente desde el pasado jueves y la preocupación de los técnicos que, desde diferentes administraciones, han llamado a los alcaldes de los pueblos para interesarse por cómo les estaba afectando la nieve, “pero claro, si la planificación y las decisiones políticas no son las adecuadas o simplemente no hay una previsión, difícilmente se pueden solucionar las demandas de los municipios”.     

Otra de las cuestiones que han agravado la situación provocada en nuestra provincia por la borrasca es el estado de las carreteras. Hoy, lunes, eran varios los pueblos que se quejaban de que, a pesar de que las quitanieves estaban pasando por su zona, la cantidad de sal que se esparcía era insuficiente para combatir el hielo y la nieve, “mucho nos tememos que la Diputación también ha fallado en estos cálculos y en la diligencia en aprovisionarse con rapidez de sal”, ha insistido Clara Plaza, “todavía hay muchas zonas intransitables, carreteras importantes en La Mancha, en los alrededores de localidades como Villaescusa de Haro y Villarejo, Torrubia del Castillo, Osa de la Vega también en La Serranía Baja y la Sierra, afectando a Moya, Cardenete o Carrascosa de la Sierra”. “En Yémeda y en Paracuellos de la Vega, por ejemplo, las granjas están desatendidas, no se puede desplazar nadie para dar de comer a los animales”, explica la portavoz del Grupo Popular.

Clara Plaza también ha querido hacerse eco del “mas que preocupante mensaje difundido en redes por el servicio de bomberos de la Diputación en el que advertían que este fin de semana, y ante una alerta como la que teníamos en nuestra provincia, se encontraban bajo mínimos y con dotaciones extremadamente reducidas”.

Plaza ha concluido pidiendo al equipo socialista de la Diputación que “restablezca, con prioridades y sensatez, lo antes posible la normalidad en nuestra provincia y que también pida a la Junta y al Gobierno de España que contribuyan a esta labor”. “Está claro que si tenemos un área específica en la institución que se ocupa de la despoblación y de nuestro mundo rural lo que no se puede permitir es que en los momentos en los que más lo necesitan nuestros municipios, en medio de una pandemia y con mucha gente mayor viviendo en ellos, se queden incomunicados y sin servicios tan esenciales como la atención sanitaria”.