El Gobierno central indica que las autovías Tarancón-Guadalajara y Cuenca-Teruel siguen sin avances concretos

La delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha confirma que los trabajos técnicos están en curso, pero aún no hay fechas ni decisiones definitivas.

La ejecución de las autovías Cuenca–Teruel y Cuenca–Albacete son dos proyectos estratégicos para la conectividad de la provincia de los que todavía «no se tiene información». Así lo ha señalado este miércoles 15 de octubre en Cuenca la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, quien ha apuntado que «se están realizando los trabajos técnicos en el Ministerio de Transportes, pero todavía no hay información».

El proyecto de la autovía autovía Cuenca que estaba previsto que uniera Cuenca y Teruel supondría la prolongación de la A-40 con el objetivo de mejorar la conexión entre Castilla-La Mancha y Aragón, facilitando el transporte de personas y mercancías entre las dos provincias. El proceso para materializar ha atravesado un enrevesado proceso desde que en 2008, el Ministerio de Medio Ambiente dictó una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) negativa para la autovía de conexión entre Cuenca y Teruel, vetando su construcción debido a su impacto ambiental. Esta decisión paralizó el proyecto de la autovía A-40, siendo esta la segunda vez que una DIA fue desfavorable para la conexión vial entre ambos puntos.

En 2023 el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) publicaba un anteproyecto del itinerario por carretera entre estos dos puntos en el que se analizaban las posibles soluciones de trazado para la autovía, definiendo las opciones en líneas generales para evaluar su viabilidad geográfica, geométrica y funcional. Un proceso que, desde entonces continúa sin nueva información ministerial que en una de sus últimas comunicaciones advirtió de «mayor factibilidad» de las vías 2+1 de tres carriles en lugar de la propuesta de vías de alta capacidad de dos carriles por sentido.

En lo referente a la autovía Cuenca-Albacete el proceso es más complejo, pues su construcción estaba supeditada a la de la llamada Autovía de la Alcarria, que unirá Guadalajara con Tarancón. El Gobierno central y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha llegaron a un acuerdo en el que el Gobierno central se comprometió a construir la Autovía de la Alcarria, mientras que la Junta de Comunidades debía asumir la construcción de la autovía entre Cuenca y Albacete. A pesar de este acuerdo, los proyectos han sufrido importantes retrasos y no se han cumplido los plazos debido a la situación de dependencia mutua en la que la finalización de una de las autovías está ligada al cumplimiento de la otra. 

En este sentido, Tolón ha señalado al ser preguntada por los medios de comunicación que «no hay ninguna opción descartada», refiriéndose a la construcción de la vía que debía unir Tarancón con Guadalajara.