Cuenca es la única provincia de la región donde bajan las estimaciones de muerte por calor este verano

El Instituto de Salud Carlos III estima cinco decesos asociados a las altas temperaturas en el periodo estival, todas ellas producidos en el mes de agosto.

Agosto ha sido uno de los meses más calurosos desde que hay registros, donde España ha vivido una de las olas de calor más longevas, de 16 días. Las altas temperaturas han provocado un aumento de las muertes por esta casuística durante el octavo mes del año, con 2.182 fallecimientos atribuibles al calor, casi el doble de las registradas en agosto del año anterior, cuando fallecieron 1.271 personas, según la estimación del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), del Instituto de Salud Carlos III.

En el caso de Cuenca, es la única provincia de Castilla-La Mancha donde ha descendido el número de defunciones atribuibles a altas temperaturas este verano. En total se han estimado cinco muertes en el periodo estival, desde el 15 de mayo hasta el 1 de septiembre, y todas ellas se han producido en el mes de agosto.

En comparación con el mismo periodo del 2024, las muertes por el calor han descendido un 58,3%, cuando entonces se registraron doce fallecimientos. Del total de este año, uno tenía la edad comprendida entre los 75 y los 84 años y el resto eran mayores de 85 años.

A nivel regional, Castilla-La Mancha ha estimado en el periodo estival un total de 270 muertes por altas temperaturas, un 55,2% más con respecto a los mismos meses del año anterior, cuando se anotaron 174 defunciones por esta causa. En todas las provincias, excepto Cuenca, estas muertes han aumentado con respecto a 2024.

La provincia que más fallecimientos anota este verano es Toledo, con 147 en total (+53%), que le sigue Ciudad Real con 90 muertes (+100%), Albacete con 16 (+33%) y Guadalajara con doce (+33%).