El Gobierno de Castilla-La Mancha no renuncia a la construcción de las autovías de la Alcarria y del Júcar a pesar de estar condicionadas al acuerdo con el Ejecutivo central. La delegada de la Junta en Cuenca, Marian López, asegura que son infraestructuras «necesarias e importantes para la presión territorial y el desarrollo socioeconómico de la provincia».
López apunta que la existencias de estas carreteras dependen de que el Gobierno de Pedro Sánchez apruebe unos presupuestos generales que tengan una partida para la autovía que conecte Cuenca con Guadalajara. «En tanto en cuanto se solucione esa situación, estamos expectantes para nosotros poder empezar a trabajar con la infraestructura hacia Albacete», destaca la delegada en la provincia.
El pasado 15 de octubre, la delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, resaltó que a pesar del acuerdo entre la Junta y el Ejecutivo nacional, los proyectos han sufrido «importantes retrasos» y no se han cumplido los plazos debido a la situación de dependencia mutua en la que la finalización de una de las autovías está ligada al cumplimiento de la otra.














