Manifiesto por un trato digno y libre de discriminación hacia las personas mayores

El día 15 de junio fue designado por las Naciones Unidas (resolución 66/127, del 19 de
diciembre de 2011) como el Día Internacional de toma de conciencia del abuso y maltrato a
las personas mayores con el fin de concienciar del grave problema de salud pública y de
violación de los derechos humanos que supone la violencia hacia las personas mayores.

El envejecimiento de la población es una gran conquista social, y un fenómeno que presenta
grandes retos a todas las sociedades y que no pueden ser ignorados de ninguna manera. En
España las personas de 65 años y más, representan casi el 20% de la población y en las
próximas décadas seguirán aumentando. Por lo que esta nueva realidad requiere actuaciones
urgentes de los poderes públicos, que garanticen la dignidad y bienestar de las personas a
lo largo de toda la vida.

Pero el grupo de personas mayores es muy heterogéneo, por lo que hay que dar
respuestas según necesidades, prestando los apoyos necesarios a los más vulnerables.
En este contexto es importante recordar la definición que la OMS hace de violencia y abuso
“acciones u omisiones únicas o repetidas que bien de forma intencionada o negligente
se cometan contra personas mayores y vulneran su integridad física, sexual, psicológica
o atentando contra su dignidad, autonomía o derechos fundamentales. Suelen
producirse en el marco de una relación interpersonal donde exista una expectativa de
confianza, cuidado, convivencia o dependencia”. La Red de Maltrato, junto a la OMS,
añade a lo anterior otras formas de maltrato estructural y social, como pueden ser normas
jurídicas insuficientes, mala distribución de los recursos y la falta de respeto y prejuicios.

La violencia y el abuso hacia las personas mayores constituyen una violación de los derechos
humanos. Y puesto que los derechos humanos son universales, todas las personas somos
titulares de los mismos. Sin embargo parece que esta información contrasta con la realidad. El
edadismo (discriminación por edad) y los estereotipos en torno a lo que significa ser mayor,
presentan a las personas desprovistas de valor y hacen que la edad sirva como justificación
para tratamientos diferenciados o exclusiones, y esta es una realidad que está presente en
nuestras sociedades.

Como consecuencia, de la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus, hemos podido
comprobar las carencias del actual sistema de cuidados, se han puesto en primer plano
asuntos relacionados con la atención y los derechos de las personas en situación de fragilidad,
discapacidad y/o dependencia. Por ello deberíamos replantearnos seriamente los modelos
de atención y como queremos que estos sean en el futuro.

Por todo lo anteriormente expuesto, las asociaciones y entidades abajo firmantes, proponemos
a gobiernos, instituciones y población en general, que se tome en consideración el siguiente
decálogo de medidas para luchar contra el abuso y maltrato a las personas mayores:

1- Que se creen servicios de apoyo a una vida independiente, suficientes, y universales,
que faciliten la inclusión en la comunidad de las personas mayores, y eviten así, su
aislamiento e institucionalización, garantizando en cualquier caso, los medios y
recursos suficientes para un cuidado digno de las personas mayores ya sea en su
domicilio, centros o residencias.

2- Que se creen estrategias preventivas más eficaces y leyes políticas firmes para
afrontar todos los casos de abandono, maltrato y violencia. Que se hagan efectivos
todos los derechos.

3- Que se enfoque el envejecimiento no como una carga o problema, sino como la
continuación de un proyecto de vida, lleno de oportunidades y derecho al acceso a
bienes y servicios y de continua participación en la sociedad para que sean las
personas mayores quienes tengan el control de su propia vida, según voluntad, deseos
o preferencias.

4- Que se acabe con las múltiples formas de discriminación de las mujeres mayores,
derivadas de sus roles sociales basados en el género y agravados por la edad y otros
matices.

5- Que seamos capaces de alentar a los gobiernos a que creen los medios necesarios
para erradicar la pobreza entre las personas mayores, en particular las mujeres, pero
también los jubilados y cónyuges de las poblaciones de menos de 500 habitantes,
actualizando los programas y actividades, acordes con las condiciones de habitabilidad
en las que se están moviendo. Garantizar el sistema público de pensiones y su
estabilidad en el futuro.

6- Que se combata la discriminación por edad, los prejuicios y actitudes negativas sobre
las personas mayores en cualquier aspecto de sus vidas, involucrando a los medios de
comunicación en el buen trato y la desaparición de estereotipos, evitando la
estigmatización de los mayores, las imágenes que generan y potencian los tópicos y
estereotipos.

7- Que se promuevan oportunidades para reforzar las alianzas intergeneracionales y la
solidaridad entre generaciones.

8- Que se creen equipos de trabajo de políticas sociales donde los mayores forman parte
activa de los mismos, de esta forma serán más conscientes de que tienen derechos y
forman parte, también, de las soluciones.

9- Que se garantice la atención sanitaria pública y se promueva un sistema sociosanitario
integrado y coordinado con otros servicios, que ponga en el centro a las personas
mayores, su autonomía y bienestar. Donde nadie se quede atrás.

10- Que la población en general se conciencie de que el abuso y maltrato a las personas
mayores es una realidad, que se visibilice y se denuncie. Que se hagan campañas de
sensibilización, que se tenga conocimiento de todas las formas de maltrato y no se
permitan.

Todos los firmantes de este manifiesto, además de expresar y reivindicar lo anteriormente
expuesto nos comprometemos también con esta causa y, por este motivo estamos dispuestos a llevar a cabo las siguientes acciones y a asumir los siguientes compromisos:

1- Utilizar el Consejo Provincial de Personas Mayores, en proceso de constitución,
impulsado por el departamento de Servicios Sociales de la Diputación de Cuenca, y
cuyo objetivo principal es garantizar la participación activa de las personas mayores en
todo aquello que les afecta en los distintos aspectos de su vida, y servir de cauce de
transmisión, o nexo, entre asociaciones de mayores e instituciones, como herramienta
de trabajo en pro de todas las propuestas elevadas en el presente manifiesto.
Sensibilizando, formando, haciendo más visibles las necesidades reales de las
personas mayores y buscando, transmitiendo, a los distintos ámbitos sociales y
políticos dichas necesidades y las propuestas de mejora.

2- Estudiar la posibilidad de adhesión de cada una de nuestras organizaciones a la
Alianza Global para los Derechos de las Personas Mayores (GAROP), creada en 2011
y de la que ya forman parte más de 200 miembros de todo el mundo. Su objetivo es
apoyar y mejorar el compromiso de la sociedad civil con los Estados miembros y las
instituciones de derechos humanos a nivel regional, nacional e internacional en torno a
una Convención sobre los derechos de las personas mayores.

3- Apoyar la propuesta de creación de la Convención de Naciones Unidas para los
derechos de las personas mayores, como marco conceptual, legal y de rendición de
cuentas, apoyada por distintos estados, por la Mesa Estatal de los derechos de las
personas mayores y HelpAge de España, cuyo objetivo principal no es crear nuevos
derechos, sino proporcionar un instrumento universal para la protección de los ya
existentes, promover, proteger y asegurar el disfrute pleno e igualitario de todos los
derechos humanos y las libertades de las personas mayores, que como todos
podemos comprobar, en la realidad, no están protegidos, son poco visibles y no están
claros para muchos.


ASOCIACIONES Y ENTIDADES QUE APOYAN EL PRESENTE MANIFIESTO:
– SERVICIOS SOCIALES DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE CUENCA
– DELEGACIÓN DE BIENESTAR SOCIAL DE CUENCA
– CÁRITAS DIOCESANA DE CUENCA
– U.D.P (UNIÓN DEMOCRÁTICA DE PENSIONISTAS) DE CUENCA
– ASOCIACIÓN PÁRKINSON CUENCA
– ASOCIACIÓN DE LA TERCERA EDAD «ANTÓN MARTÍN» DE MIRA
-ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS «LA SANTA CRUZ» DE LA
HUÉRGUINA
– ASOC. DEMOCRÁTICA DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS DE CAMPILLO DE
ALTOBUEY (ADEJUPE)
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «SAN MARTÍN»
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «SAN ANTONIO DE PADUA»
– ASOCIACIÓN «SANTÍSIMO CRISTO DE LA PIEDAD»
– ASOCIACIÓN DE LA TERCERA EDAD, PENSIONISTAS Y JUBILADOS DE
CASTILLEJO DEL ROMERAL
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «EL CAÑO» DE BARCHÍN DEL
HOYO
– CLUB DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS DE EL CAÑAVATE
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS «LA AMISTAD» DE LA PESQUERA
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS DE EL PEDERNOSO
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «SAN BLAS» DE ALMONACID DEL
MARQUESADO
– ASOCIACIÓN DE TERCERA EDAD «SANTO ROSTRO»
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS «EL CABEZUELO»
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «FEDERICO GARCÍA LORCA»
– CONCEJALÍA DE SERVICIOS SOCIALES DE CASASIMARRO
– ASOCIACIÓN CENTRO DE MAYORES DE SAN LORENZO DE LA PARRILLA
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS «SAN AGUSTÍN»
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS «MONTE RODENAL»
– ASOCIACIÓN DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS «SAN ROQUE» DE PORTILLA
– CLUB DE PENSIONISTAS Y JUBILADOS DE VILLANUEVA DE LA JARA
– ASOCIACIÓN DE MAYORES DE VILLAGORDO DEL MARQUESADO
– ASOCIACIÓN LOCAL DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS «SAN ISIDRO»
– ASOCIACIÓN DE JUBILADOS “SAN JORGE DE ARGUISUELAS”