En el último suspiro del partido, en el minuto 90 del tiempo reglamentario, se le ha escapado a la Unión Balompédica Conquense la victoria en el partido disputado este domingo contra el filial del Club Deportivo Tenerife en el exilio forzado del Cristina Martínez. El visitante Faya puso al borde del final el 1-1 definitivo tras transformar un libre directo. Un disparo rebotado que se transformó en un jarro de agua fría. Se amargó así el primer punto conseguido por los blanquinegros en Segunda Federación y se empañó un partido en el que demostraron solvencia y ganas.
Antes del inicio del encuentro, se guardó un minuto de silencio por la pérdida de Jesús Ayllón Soria, antiguo socio. El partido comenzó intenso, como se esperaba. Los locales fueron ambiciosos y valientes desde el inicio, con un acercamiento espídico de Yuya Yoshimura, ya en el minuto 11 que obligó a la salida del meta Moha. El portero de los canarios también también se tuvo que emplear en torno al 15 para evitar un gol olímpico de Caba. Poco después fue Pedro Inglés el que la tuvo, aunque en este caso fue la defensa la que desvió el intento a saque de esquina.
En el minuto 30 tuvo que retirarse lesionado Kain, que fue sustituido por Joan Monterde. Fue precisamente él quien apenas siete minutos de entrar en el terreno de juego marcó el gol que adelantaba otra vez al Conquense. Una asistencia memorable de Caba dejó solo al jugador saguntino, quien definió con maestría. 1-0. Como en Majadahonda, los balompédicos empezaban ganando.
El reto era ahora saber gestionar esa ventaja. La manera de hacerlo fue no dejar de intentarlo, no renunciar a sentenciar el partido. Y hubo varias ocasiones en las que a punto de estuvo de hacerlo el Conquense, con buenas jugadas terminadas por Caba y el propio Monterde.
Mientras el Tenerife B fue armando también acercamientos con más peligro y capacidad de generar miedo, como los de Ethyan González y Alassan Manjam Gutiérrez, pero resistían los locales.
Rober Guitiérrez apostó por una profunda renovación de los jugadores en el campo con la entrada, primero de Luis Castillo, por Caba y, después en un triple cambio de Etxebe, José Álvarez y Bema Sina por Héctor Rubio, Marcos Recuenco y Sergio Rodríguez. Este estuvo cerca de hacer el segundo.
Pero quien marcó finalmente fue el equipo tinerfeño. Avisó en el 87 con Salifo dentro del área y lo remató de balón parado para entusiasmo de Faya y sus compañeros. Otra vez se iban los puntos en el último tramo del partido.