De Cuenca al Himalaya para grabar el glaciar más elevado del planeta

El divulgador conquense, Pepe Molina, acaba de emprender su décimo viaje del proyecto, 'Evanescet'

Nacido en Cuenca, en plena capital, y residente en Barcelona. Pepe Molina se licenció en Humanidades por la UCLM. Formado como periodista, realizador, cámara de viode-fotografía y piloto de dron, ha colaborado con varios medios nacionales e internacionales. Aunque, si tiene que encontrar un perfil que lo defina lo suelta sin pensarlo “videógrafo-documentalista”, espeta.

Y es que este perfil profesional que desempeña como freelance, lo mantiene inmerso en proyectos personales que han llegado a colarse en las Naciones Unidas, como es el caso de ‘Evanescet, los últimos glaciares’.  Una iniciativa persona que cumple diez años y fue elegido en marzo de este año por la ONU, Unesco y World Meteorological Organization, para formar parte de la plataforma de difusión internacional de la ONU, el ‘Art For Glaciers Preservation’.

A punto de partir hacia su décimo viaje- que corresponde con su décimo proyecto- contacta Voces de Cuenca a Pepe Molina. Le restan horas para tomar rumbo hacia Nepal, concretamente, permanecerá un mes en el campamento base del Everest filmando el glaciar más elevado del planeta, el de Khambú. “Quiero sensibilizar, sobre todo desde lo artístico, más que desde la ciencia, sobre la situación de los glaciares y la cada vez más acelerada crisis climática”, explica este conquense que ha pisado desde la Antártida hasta el Ártico.

“Espero que sirva para que las personas despierten”, explica sobre un trabajo que se asienta en filmar los glaciares y, a través de lo artístico, aportar información sobre el estado en el qué se encuentran. Se trata de un trabajo de divulgación adornado por el arte del fotograma y su posproduccion pero que, en comparativa de esta última década, desprende un dato sobrecogedor. “En los último cinco años observo el cambio más drástico en los deshielos, cada vez tenemos menos glaciares”, detalla.

Las imágenes que capte ahora se someterán a una comparativa con otras filmadas por una expedición suiza en 1954. Entre sendas campañas de grabación de Khambú se desprenderán datos e información de su evolución y cambio en estos setenta años y, quizá, sobre su futuro inminente.

Su regreso a España vendrá acompañado del periodo de posproducción y, también desliza el deseo de poder exponer sus trabajos en su tierra natal. “Tengo esa ilusión desde hace mucho”, expresa el artista conquense.