El concejal de Movilidad, Héctor Serrano, ha afirmado durante el pleno ordinario del Ayuntamiento de Cuenca que «en las próximas semanas» se iniciará el expediente para la licitación de un nuevo contrato para el transporte público de la ciudad. El edil lo ha anunciado durante su turno de intervención en el debate de la moción presentada por el Grupo Municipal Popular para rediseñar el actual sistema de autobuses urbanos, la cual ha resultado rechazada por el voto de calidad del alcalde.
La concejal del Grupo Municipal Popular, Beatriz Jiménez, ha criticado que el fallido sistema de transporte urbano puesto en marcha el pasado 1 de septiembre con las modificaciones de las líneas «no haya provocado responsabilidades políticas» dentro del equipo de Gobierno. «Ni dimisiones ni cesiones a una situación que ha provocado el caos en la ciudadanía», ha dicho la edil.
Asimismo, la popular ha resaltado que han exigido «explicaciones» sobre el estado del transporte público en Cuenca «tanto en medios de comunicación como en diversos plenos ordinarios» con mociones presentadas por este grupo municipal. Por ello, el PP solicita la creación de una Comisión de Investigación con la que se tenga acceso a toda la documentación «para saber qué se hace en el Ayuntamiento para comprobar y corroborar tanto los kilómetros como que las acciones de la empresa se cumplen acorde al contrato”.
Jiménez ha insistido en «el despilfarro» que está suponiendo el transporte público para los conquenses, y ha incidido en el gasto que «ha conllevado asuntos como el intercambiador» cuyo coste «extra» han cifrado en 30.000 euros.
Asimismo, los populares han propuesto crear una mesa de trabajo con grupos políticos, asociaciones y vecinos de la ciudad «a través de un proceso participativo» para diseñar un nuevo contrato para el transporte público en la capital conquense. En este sentido, piden que esta mesa esté presidida por algún concejal de los grupos minoritarios, y que las reuniones de la Comisión se celebren con una periodicidad de quince días, y un plazo máximo para sacar conclusiones de seis meses.
Por su parte, el portavoz de Vox Rafael Rodríguez ha coincidido en que deben exigir responsabilidades políticas «ya que se han cometido errores graves que deben tener una explicación». Sobre la comisión de investigación, Rodríguez plantea que sea dirigida por el Grupo Municipal Popular y no por grupos minoritarios, además de votar a favor de esa mesa permanente. «Entendemos que antes de haber puesto en marcha las modificaciones, qué hubiera ocurrido esperar una o dos semanas más para realizar más pruebas de cómo iba a funcionar el intercambiados y las nuevas líneas», ha resaltado Rodríguez.
El concejal de la confluencia política Cuenca en Marcha, Pablo García, ha apuntado que para crear un nuevo sistema de transporte pública es necesario «escuchar a los barrios y vecinos que usan los autobuses urbanos». Destaca que el «caos» que se provocó a principio de septiembre con la modificación de las líneas fue «por desatender los intereses de las asociaciones vecinales». Por ello, ha indicado que ahora «hay que deshacer el nudo que no ha deshecho el equipo de Gobierno». Asimismo, García ha explicado que es necesario la mejora del sistema «para el correcto funcionamiento de la Zona de Bajas Emisiones». El edil ha concluido en que hay que «replantear el modelo de ciudad y la movilidad urbana».
El concejal de Movilidad, Héctor Serrano, ha anunciado que su grupo votaría en contra de la moción, ya que considera que no hace falta una comisión de investigación porque «los grupos tienen acceso al expediente si lo solicitan y el edil que diseñó las líneas ya ha dado explicaciones». Asimismo, el edil competente apunta que la Mesa de Trabajo Permanente debe estar compuesta por «técnicos municipales o externos que realicen estudios para tomar diferentes decisiones que ejecuten las nuevas líneas». Sobre un nuevo contrato del transporte público, Serrano asegura que el expediente se iniciará en las próximas semanas y realizarán ronda de consultas con vecinos y grupos políticos para diseñarlo.
Por su parte, Beatriz Jiménez ha criticado que el concejal de Movilidad «haya sido escueto», ya que «lo que tiene que hacer es dar explicaciones de lo ocurrido». Una opinión que ha compartido el portavoz de Vox, Rafael Rodríguez, que ha exigido a Serrano que «de explicaciones, ya que ha aceptado el cargo de Movilidad y llevarse el marrón».
La edil popular vuelve a pedir «responsabilidades políticas» por haber provocado «uno de los errores más graves de este Ayuntamiento». «Ustedes se aferran bien al sillón en vez de ver qué pasa con los conquenses ahí afuera», ha sentenciado Jiménez. Asimismo, ha resaltado que esta moción estaba en mano de Cuenca Nos Une. Una petición que ha respondido su líder, Isidoro Gómez Cavero, quien ha subrayado que él «ha venido a conseguir proyectos gordos a la ciudad».
El alcalde, Darío Dolz, ha tomado la palabra para aclarar que cuando se creó el actual contrato de transporte público en la ciudad en 2012 «no tenía las competencias, aunque estuviera en el equipo de Gobierno», y que él adquirió la cartera «un año después». Asimismo, ha leído el programa electoral del PP en 2023 en el que incluían el rediseño de líneas urbanas «ya sea con conexión entre líneas o con trasbordo entre líneas», explicando que «también hablaban de un intercambiador, según lo que leo».
La moción presentada por los populares ha sido rechazada con el voto de calidad del primer edil al resultar la votación empate a doce votos favorables por parte del PP, Cuenca en Marcha y Vox y en contra del PSOE y Cuenca Nos Une.













